El destino es quiénes somos y lo que hacemos con las oportunidades que nos brinda la vida.
Lisa Kleypas
Seré ingeniero, decía uno; y su compañera afirmaba: pues yo agrónomo. Y yo aviador, agregaba jovial un tercero. A ninguno de nosotros se nos ocurría dudar un instante de una cosa: de que teníamos abierto un amplio camino hacia los estudios universitarios, hacia el trabajo y la creación.
Aleksandr Kótov
La indiferencia es abulia, parasitismo y cobardía, no es vida. Por eso odio a los indiferentes.
Antonio Gramsci
Estamos en un momento de la historia del planeta donde los latinoamericanos podemos realmente cambiar el rumbo de la historia en un montón de cosas. Si nos unimos y entendemos que, por ejemplo, el valor de nuestros bosques como ecosistemas es mayor que el de la madera, éste es nuestro siglo definitivamente.
Charly Alberti
La enemistad es una ira que busca la ocasión de poder vengarse.
Cicerón
Cuanto más alto estemos situados, más humildes debemos ser.
Hay en el diccionario tres palabras que causan la ruina del rico, y tres que causan el bienestar del pobre; son las primeras: lujo, ambición y soberanía; las segundas: trabajo, honradez y economía.
Fermín de Alcaraz
No puedo cambiar la dirección del viento, pero sí ajustar mis velas para llegar siempre a mi destino.
James Dean
Un artista, en comparación con sus prójimos, es una persona no solamente dotada de poder para la ejecución, sino además de una sensibilidad inusitada para las cualidades de las cosas, Esta sensibilidad también dirige sus actividades y trabajos.
John Dewey
Llorando la ausencia del galán traidor la halla la luna y la deja el sol, añadiendo siempre pasión a pasión, memoria a memoria, dolor a dolor.
Luis de Góngora
Es natural condición de mujeres despreciar a quien las quiere y amar a quien las aborrece.
Miguel de Cervantes
En esta jungla de animales que juegan a ser hombres.
Mucho Muchacho
Todo el mundo sabe que elijo a los equipos por la belleza de sus chicas.
Murray Walker
Contra los males persistentes y que nuevamente retoñan, necesitamos de un remedio constante, no ya para desarraigarlos, sino para que no nos venzan.
Séneca
El mayor imperio es el imperio de uno mismo.
La libertad es un vino generoso que trastorna los cerebros débiles. Sólo una larga costumbre nos prepara para soportarla en fuertes dosis.
Simon de Sismondi