Sé quién era esta mañana cuando me levanté, pero creo que he debido cambiar varias veces desde entonces.
Lewis Carroll
Conquistar los deseos destruye para siempre el ánimo que teníamos antes de abrazarlos.
Alejandro Lanús
Amad lo que nunca volveréis a ver.
Alfred de Vigny
Patrik era consciente de que se estaba comportando de un modo sentimental y patético, pero a aquella hora del medio día empezaba a comprender el alcance de la responsabilidad que había asumido al nacer su hija y el alcance del amor y del miedo que implicaba.
Camilla Läckberg
No temer a la muerte: es de estúpidos continuar perdiendo los placeres de la vida por miedo a la muerte.
Catón
No siempre puede hacerse el bien a todo el mundo, pero a todos se les puede manifestar bondad.
Charles Rollin
La diplomacia es un arte, y no es ningún secreto que personajes como Kappra, ministros de regímenes tan bajos como el Portugal de Salazar, lo hayan prostituido.
Fidel Castro
La felicidad no está en las cosas, sino en el gusto de ellas.
François de La Rochefoucauld
La producción de la seguridad debe, por el interés de los consumidores de este bien inmaterial, permanecer sometida a la ley de la libre competencia.
Gustave de Molinari
En mi casa tengo tres sillas; una para la soledad, otra para la amistad, y una tercera para la sociedad.
Henry David Thoreau
Las palabras y las obras no comer en la misma mesa.
James Howell
Quiero jugadores que puedan hacer movimientos decisivos en espacios pequeños, quiero que trabajen lo menos posible para ahorrar energía para esa acción decisiva.
Johan Cruyff
Pedir y más pedir, esto hace el hombre; llamar fe y esperanza a su egoísmo; sobre un altar divinizar un nombre y darse en realidad culto a si mismo.
José Alcalá Galiano
La vida ofrece a cada criatura su copa de amargura.
Manuel Azaña
Luché contra un lagarto. Peleé contra una ballena. Sólo la semana pasada asesiné a una roca, lesioné a una piedra y hospitalicé a un ladrillo. Soy tan malo que hago enfermar a los medicamentos.
Muhammad Ali
Y paso la vida una vez más preguntándote si en tu propia vida comenzarías a creer. Nuevamente el silencio fue tu mejor respuesta y la incertidumbre tu mejor herramienta.
Roque Valero