El mundo, mi mundo, está bajo tus pies, mi ángel, mi princesa, mi amada inmortal.
Leopoldo Lugones
Soy el general de los pobres.
Augusto Pinochet
El arte no es una moda.
Christoph Waltz
Sentí que realmente quería dar marcha atrás de la música por completo y sólo el trabajo dentro de las artes visuales lo logré de alguna manera. Empecé a pintar muy apasionadamente en ese momento.
David Bowie
No quemes libros. No creas que vas a ocultar pensamientos ocultando las pruebas de que alguna vez existieron.
Dwight D. Eisenhower
Los presumidos son absurdos.
Emma Thompson
El lenguaje político está diseñado para que las mentiras parezcan verdades, el asesinato una acción respetable y para dar al viento apariencia de solidez.
George Orwell
¡Qué difícil es actuar inteligentemente si la sociedad se vuelve estúpida!
José Antonio Marina
Lo malo de discutir con los imbéciles es que tienes que ponerte a su altura para que te entiendan; y ahí es donde estás perdido, porque ellos saben hacer el imbécil mucho mejor que tú.
José Luis Coll
Y hacía imposible aquella venganza que, por lo menos, podía tomar de improviso contra los otros. Un ángel, para una mujer, es siempre más irritante que una bestia.
Luigi Pirandello
El deporte tiene el poder de transformar el mundo. Tiene el poder de inspirar, de unir a la gente como pocas otras cosas. Tiene más capacidad que los gobiernos de derribar las barreras sociales.
Nelson Mandela
Los momentos clave, combinados con decisiones y acciones conscientes, y con una buena dosis de esperanza, pueden arrastrarte a un futuro que parece predestinado.
Nicholas Sparks
Si usted tiene tiempo para inclinarse, usted tiene tiempo para limpiar.
Ray Kroc
Yo no soy patriota. Este vocablo que hace más de un siglo significaba la revolución y libertad ha venido a corromperse y hoy manoseado por la peor gente incluye la acepción, más relajada de los intereses políticos y expresa la intransigencia, la intolerancia y la cerrazón mental.
Santiago Carrillo
No me interesan las ideas sólo los hombres.
William Faulkner
No confiéis en quien haya perdido la fe.
William Shakespeare