No temas al otoño, si ha venido. Aunque caiga la flor, queda la rama. La rama queda para hacer el nido.
Leopoldo Lugones
No podemos llegar a sobresalir en el trabajo si no hacemos otra cosa que trabajar.
Anna Quindlen
El vicio, básicamente, es siempre el amor por los fracasos.
Elfriede Jelinek
Todo proyecto es una forma de esclavitud.
Emil Cioran
Mi trabajo es mi única relación con el todo.
Federico Fellini
Quiero agradecer mi premio a la señora que me ha atendido en los lavabos, a las azafatas, los acomodadores, el cajero que corta la entrada... y a mi mano derecha.
Fernando Arrabal
Últimas palabras del doctor Juvenal Urbino, quien deja a la muerte aguardando, hasta ver al motivo de su último aliento y le dice: Sólo Dios sabe cuánto te quise.
Gabriel García Márquez
El mundo es un bosque, en el que todos pierden su forma, aunque por camino diferente cada uno.
George Villiers
Uno ignora lo que el tiempo hará de nosotros con sus capas finas que se superponen indistinguibles, en qué es capaz de convertirnos.
Javier Marías
El sistema ha organizado un casino para que ganen siempre los mismos.
José Luis Sampedro
No me importa a qué lugar me traspasen. Si me traspasan a alguna parte - jugaría en cualquier sitio.
Kobe Bryant
Creo que soy muy orientado a objetivos. Me gustaría ganar la Copa América. Me gustaría que Oracle sea la compañía de software número uno en el mundo. Sigo pensando que es posible vencer a Microsoft.
Larry Ellison
Tenemos que sustituir la belleza, que es un concepto cultural, por la bondad, que es un concepto humanista.
Philippe Starck
El papel paraguayo -no el papel del libro, de la revista o del diario, sino el papel moneda- vale, según dicen, cada vez menos. Hay gentes que se consternan ante este fenómeno. Yo no: me felicito de que el dinero pierda su valor, y deseo que llegue el día en que no tenga ninguno. Entonces dejaremos de ocuparnos de él, y nos habremos emancipado de una superstición que nos rebaja.
Rafael Barrett
La ironía es el humor de la inteligencia.
Rafael Humberto Moreno-Durán
Las personas tienen que ser disuadidas de golpear hacia fuera sin reflexionar sobre sí mismas.
Theodor Adorno