..., un partido desvinculado de las tareas históricas de su clase se convierte o corre el riesgo de convertirse en instrumento indirecto de las demás.
León Trotski
¡Sato, Super Sato! ¡Super Sato acaba de pasar a Ralf Schumacher!
Antonio Lobato
Aprender a hablar cuesta muchos meses. Aprender a amar puede costar años.
Ashley Montagu
Mis héroes son los que cometieron errores, pero los enmendaron y se recuperaron.
Bono
Cada niño que viene al mundo es más hermoso que el anterior.
Charles Dickens
El Maestro Azato no sólo no era superado en todo Okinawa en el arte del karate sino también sobresalía en equitación, en esgrima japonesa (Kendo) y en arquería. Él fue, más bien, un brillante erudito. Fue mi buena suerte que me prestara su atención y que recibiese mi primera instrucción en karate en tan extraordinarias manos.
Gichin Funakoshi
Anda, mi amor, yo voy también aunque me quede lejos y estaré allí con vos en el viento y la lluvia, en el calor del medio día, en las tapitas de dulce, en las chicharras y en los grillos, en el peligro, allí por donde andes, andaré yo, entre la tierra y tu sombra habrá una mujer acariciándote.
Gioconda Belli
Casarse con un hombre es como la compra de algo que ha deseado mucho tiempo. Puede amarlo cuando llega a casa pero no siempre se anda bien con el resto de la casa.
Jean Kerr
Donde quiera que estés, te gustara saber que te pude olvidar y no eh querido y por fria que fuese mi noche triste no eche al fuego ni uno solo de los besos que me diste.
Joan Manuel Serrat
Mi intención es demostrar que la máquina celestial no es como un ser divino, sino como un reloj.
Johannes Kepler
Está haciendo un arbitraje Poncio Pilatos.
Jorge Valdano
El Maestro mantiene su mente.
Lao-Tse
Nuestro objetivo es, y seguirá siendo, conseguir los puntos necesarios para dejar a tres equipos por debajo al final de temporada.
Manuel Preciado
Hay dos tipos de estadísticas: las que lees y las que haces.
Rex Stout
Una de las desdichas de nuestro país consiste, como se ha dicho hartas veces, en que el interés individual ignora el interés colectivo.
Santiago Ramón y Cajal
Nunca odié a un hombre lo suficiente como para devolverle sus diamantes.
Zsa Zsa Gabor