Frase de León Tolstói

← Anterior Siguiente →
No hay que escribir sino en el momento en que cada vez que mojas la pluma en la tinta, un jirón de tu carne queda en el tintero.... - León Tolstói

No hay que escribir sino en el momento en que cada vez que mojas la pluma en la tinta, un jirón de tu carne queda en el tintero.

León Tolstói

Todas las frases de León Tolstói →

Explorar Frases

El corazón, cuando palpita por nada, palpita escondido.

Antonio Porchia

Los pesimistas dirán que soy muy pequeño para la obra que tengo emprendida; pero mi insignificancia está sobrepujada por la altivez de mi corazón de patriota, y así juro ante la Patria y ante la historia que mi espada defenderá, el decoro nacional y que será redención para los oprimidos.

Augusto César Sandino

El amor mismo es de corta duración, como una flor. En el hombre muere de muerte natural con el matrimonio; en la mujer sobrevive a menudo hasta el fin, transformado en puro cariño materno por el caído héroe de sus sueños.

Axel Munthe

¿Qué es la avaricia? Un continuo vivir en la pobreza por temor a ser pobre.

Bernardo de Claraval

La opinión es libre, pero los hechos son sagrados.

Charles P. Scott

Esa fortaleza de ánimo que resulta más valiosa para quien la posee que una fortuna.

Charlotte Brontë

El autoengaño opera tanto a nivel de la mente individual como a nivel colectivo.

Daniel Goleman

Jake, en tu vida vas a conocer a muchas personas muy talentosas, y no todas serán artistas. No todas tendrán el cerebro para saber cuándo insistir y saber... cuándo parar. Cuándo esforzarse y cuándo solo relajarse. La mayoría no tendrán ese equilibrio.

Greg Kinnear

Cada partido es una historia.

Helenio Herrera

Permiteme que el que toca arpa y canta tiene mucha ventaja.

Hugo Chávez

Los hombres, desde niños, aprenden a dividirse en lobos y corderos.

Jaime Campmany

La paz en la tierra, suprema aspiración de toda la humanidad a través de la historia, es indudable que no puede establecerse ni consolidarse si no se respeta fielmente el orden establecido por Dios.

Juan XXIII

Si eres capaz de ajustar la campaña y cambiar conforme al ímpetu de las fuerzas, entonces la ventaja no cambia, y los únicos que son perjudicados son los enemigos. Por esta razón, no existe una estructura permanente. Si puedes comprender totalmente este principio, puedes hacer que los soldados actúen en la mejor forma posible.

Sun Tzu

... el Reino de Dios, instituido por Moisés, terminó con la elección de Súl; después de esa época, el sacerdote jamás depuso a ningún rey basándose en su propia autoridad.

Thomas Hobbes

La vida es un círculo de dolores.

Voltaire