Los locos no existen; sólo les repugna la realidad.
León Gieco
El primero de los mandamientos es el amor a Dios, pero en el orden de la acción debemos comenzar por llevar a la práctica el amor al prójimo Amando al prójimo y preocupándote por él, progresas sin duda en tu camino.
Agustín de Hipona
El dinero habla un lenguaje que entienden todas las naciones.
Aphra Behn
Las academias que se forman a cargo del Estado se instituyen no tanto para cultivar las mentes, cuanto para embridarlas.
Baruch Spinoza
No amar es casi un homicidio y no tendría fuerzas para inferir tal golpe a nadie.
Borís Pasternak
Las ignorancias parciales son el secreto de la creación, lo que más nos atrae. Por eso debemos cuidar nuestras ignorancias, mantenerlas vivas, latentes, convertir los conocimientos en fuentes de ignorancia.
Dalmiro Sáenz
Cuando el hombre es honrado embellece todo lo que hace y en este nivel todos los hombres somos iguales.
Fernando González Ochoa
Una historia no se acaba hasta que ha tomado su peor camino.
Friedrich Dürrenmatt
Las buenas noticias pueden darse a cualquier hora, pero las malas hay que darlas por la mañana.
George Herbert
Si eres homofóbico, sexista o racista... te dire algo... ¡Largate a casa ya!
Gerard Way
La libertad y la fraternidad son palabras, mientras la igualdad es un hecho. La igualdad debe ser la gran fórmula humana.
Henri Barbusse
En el mundo lo que importa es el poder, la educación viene después.
James McAvoy
Para recibir el don de la felicidad el talante más adecuado es, pues, el desprendimiento: no estar prendido a nada, desprenderse de todo. La felicidad, como el pájaro libre, no está nunca en mano, sino siempre volando. Pero tal vez, con suerte y quietud por nuestra parte, se pose, por unos instantes, sobre nuestra cabeza.
José Luis López Aranguren
... la ilusión de hacer revolución por el simple hecho de girar entorno al poder.
Paulo Freire
No importa lo que nos haya pasado, lo que nos esté pasando o lo que nos pueda pasar: existe un espacio entre esas cosas y nuestras respuestas a ellas.
Stephen Covey
El pobre que se resigna con su suerte y no busca hacerse rico, sea como sea, a las buenas o las malas, es un cobarde o un inútil, y no puede convertir su vileza en un mérito.
Vicente Blasco Ibáñez