Yo sólo puedo mostrarte la puerta, tú eres quien la tiene que atravesar.
Laurence Fishburne
No hay ninguna cosa seria que no pueda decirse con una sonrisa.
Alejandro Casona
Si el sexo es un fenómeno tan natural, ¿cómo es que hay tantos libros sobre como hacerlo?
Bette Midler
La sociedad ha sido injusta conmigo. Mataremos a cualquier cerdo que esté en la casa. Entren y atrápenlos.
Charles Manson
El Menemismo ha llegado al fútbol.
David Castro
Los actores son una gran familia alrededor del mundo.
Eleanor Roosevelt
Leer les agrandará, chicos, el deseo, y el horizonte de la vida.
Ernesto Sabato
Se gana y se pierde, se sube y se baja, se nace y se muere. Y si la historia es tan simple, ¿por qué te preocupas tanto?
Facundo Cabral
Donde el silencio ya no dice nada porque nadie lo oye; a esta hora que no es la noche aún sino en los vacuos rincones en que ardieron nuestros ojos; donde la rosa no es ya sino el nombre sin rosa de la rosa y nuestros dedos no saben ya el contorno de las frutas ni los labios la pulpa de los labios.
Gilberto Owen
La impresión que tuve la primera vez que fui a Inglaterra es que, quitando las elites de las grandes ciudades y a Newton y Darwin, son unos bárbaros. Claro que eso es mucho quitar, pero los ritos antiguos, las familias comiendo un pedazo enorme de pierna de cordero, el modo de comportarse, el tipo burdo de trato... Y no digamos los alemanes.
Gustavo Bueno
No es verdad que el hombre, aunque parezca decirlo algunas veces, no pueda organizar la tierra sin Dios. Lo cierto es que sin Dios no puede, en fin de cuentas, más que organizarla contra el hombre.
Henri de Lubac
Un hombre no puede actuar con acierto en un nivel de su vida si está ocupado actuando desacertadamente en otro. La vida es un todo indivisible.
Mahatma Gandhi
Hay una incomodidad... algo muy puro, que no se puede fingir. Su nombre es James Dean.
Robert Pattinson
Así conversábamos en torno de la mesa del café, sombríos y gozosos de nuestra impunidad ante la gente, ante la gente que no sabía que éramos ladrones, y un espanto delicioso nos apretaba el corazón al pensar con qué ojos nos mirarían las nuevas doncellas que pasaban, si supieran que nosotros, tan atildados y jóvenes, éramos ladrones... ¡Ladrones!
Roberto Arlt
Los buenos son más sospechosos a los tiranos que los malos; la virtud ajena siempre les resulta temible.
Salustio
La civilización es el afinamiento del espíritu, el respeto al semejante, la tolerancia de la opinión ajena, la suavidad de las costumbres.
Vicente Blasco Ibáñez