Bienvenido al mundo real.
Laurence Fishburne
En la comedia de los encuentros cotidianos sólo veo dramas.
Alejandro Lanús
Cuando cambiamos interiormente, debemos cambiar también los objetos que nos rodean.
Anaïs Nin
No hay cosa tan común en el mundo como hacerse insoportable con sus buenas cualidades.
Antoine François Rondelet
Los fundadores del partido en 1919 eran muy pocos y los votos fascistas depositados en los comicios de ese año en Milan sumaron 4.700. En 1921 los miembros del partido llegaron a 20.000. En 1922 llegué a la conclusión de que la revolución era inevitable.
Benito Mussolini
Se preguntó si todas las personas, incluidos los locos, no eran más que un fragmento de alma en busca de amor.
Deepak Chopra
A donde quiera que vayamos en medio del movimiento y la actividad, llevemos con nosotros la quietud. De esa manera, el movimiento caótico que nos rodea jamás nos ocultará la puerta de acceso al manantial de creatividad, al campo de la potencialidad pura.
Nadie debería morir en un tren yendo al curro, nadie debería morir por el control del crudo.
El Chojin
Toda liberación depende de la toma de conciencia de la servidumbre, y el surgimiento de esta conciencia se ve estorbado siempre por el predominio de necesidades y satisfacciones que, en grado sumo, se han convertido en propias del individuo.
Herbert Marcuse
Si un escritor se considera revolucionario (y siempre todo verdadero escritor ha estado en pugna contra los órdenes sociales injustos), elegirá la lucha contra su medio ambiente, tratará de superarse y superarlo por todos los medios.
Jorge Teillier
La Mejor Defensa es el ataque.
Kalimán
El primer vaso corresponde a la sed; el segundo, a la alegría; el tercero, al placer; el cuarto, a la insensatez.
Lucio Apuleyo
Fácilmente la 'skepsis' frente a lo no demostrado se convierte en la prohibición de pensar.
Theodor Adorno
¡Si no lo grito muero! ¿Te he dicho ya que te amo?
Tiziano Ferro
Hay que darse cuenta del contraste que existe entre estas cosas (las reales), y las que piensa él.
Virginia Woolf
A veces creo que la histeria no es otra cosa que la conspiración del inconsciente, que intenta reproducir asépticamente el estado físico de la excitación sexual sin el placer, acompañándolo de sufrimiento.
Yukio Mishima