Hay que mirar a los ojos al Misterio.
Lance Armstrong
Podré escribir cien mil estrofas, podré rimar millones de versos, podré partirme el alma en ese intento, y jamás podré expresar todo lo que te quiero.
Anónimo
Hay una filosofía para las ciencias. No la hay para la poesía. No conozco moralista que sea un poeta de primer orden. Es extraño, dirá alguien.
Conde de Lautréamont
Un pastor no distingue las ovejas buenas de las malas. Por eso no pregunta a nadie cómo son sus ovejas, antes de lanzarse contra el lobo. Así hay que defender a los indios buenos y malos contra los blancos: lobos de estas tierras.
Ermilo Abreu Gómez
Quien no es envidiado, no es digno de serlo.
Esquilo
Si la naturaleza no nos hubiese hecho un poco frívolos, seríamos muy desdichados. Gracias a que somos frívolos la mayoría de la gente no se ahorca.
Fernando Savater
Admiramos las cosas por motivos, pero las amamos sin motivos.
Gilbert Keith Chesterton
Les enseñé todo lo que saben, pero no todo lo que sé.
James Brown
Casi todo lo que habla la historia no es otra cosa sino peleas y matanzas.
John Locke
El conocimiento es problema de la ciencia y ésta no admite ni la menor deshonestidad ni la menor presunción; lo que exige es ciertamente lo contrario; honestidad y modestia.
Mao Zedong
La guerra civil no da gloria.
Marqués de Bonchamps
Hemos llegado a una fase en la evolución de nuestra especie en la que el próximo gran avance adaptativo debe ser o bien la eliminación de las armas nucleares o bien la eliminación de la guerra misma.
Marvin Harris
Donde no hay celos no hay amor.
Pietro Aretino
Cuando el ser humano examina la religión desde un punto de vista crítico y en lugar de obediencia y temor ciego busca convicciones basadas en la razón, esa condición no puede mantenerse mucho tiempo. La contradicción interna es una sentencia de muerte para toda ética, un gusano que roe la energía del hombre.
Piotr Kropotkin
Trajano no necesitaba de consejeros imperiales para saber eso. No había que ser ni un genio ni un filósofo griego para saber que a más impuestos menos gastaba la gente y la economía del Imperio terminaría en un colapso absoluto que no interesaba a nadie. Sólo los imbéciles eran incapaces de no ver algo tan sumamente simple.
Santiago Posteguillo
En cualquier cosa que hagas, ten presente la muerte.
Séneca