Soy malo haciendo lo que hago mejor. Y por este don me siento afortunado.
Kurt Cobain
Sean quienes sean los padres que has tenido, es el universo quien te creó.
Alejandro Jodorowsky
Durante la comida se debe beber muchas veces y poco cada vez.
Anónimo
El sabio consigue más ventajas por sus enemigos que el necio por sus amigos.
Benjamin Franklin
Desde Rabelais, cada generación de Gargantúas siente un horror juvenil por los Holofernes y una gran necesidad de Ponocrates; en otras palabras el deseo siempre renovado de formarse oponiéndose al aire de los tiempos, al espíritu del lugar, y el deseo de florecer a la sombra -¡o, más bien, en la claridad!- de un maestro considerado ejemplar.
Daniel Pennac
Podrán destrozar mi corazón, pero no mis negocios.
Donald Trump
Bajo tales tormentos sucumbió lo poco que había de bueno en mí. Infames pensamientos convirtiéronse en mis íntimos. Los más sombríos, los más malignos de todos los pensamientos eran acariciados por mi mente. La tristeza de mi humor de costumbre se acrecentó hasta hacerme aborrecer a todas las cosas y a la humanidad entera.
Edgar Allan Poe
La ley de la naturaleza del hombre es la igualdad.
Eurípides
Una vez comprendas el temperamento de un autor, la comprensión de sus escritos te resultará fácil.
Henry Wadsworth Longfellow
Señor, si he obrado bien, tú lo sabes; y si mal, yo me acojo a tu infinita misericordia.
José María Morelos
Nunca desfilé sobria.
Kate Moss
Agradezcamos a los que nos benefician y beneficiemos a los agradecidos.
Mahoma
Quiero ser humilde y pase lo que pase siempre Libre.
Rapsusklei
Quizá hubiera podido convencerla a tiempo de que tenía buenas intenciones, de que su querida persona me era importante, y de que por muchos hermosos motivos quería hacerla feliz, y con ello a mí mismo; pero no me esforcé más, y ella partió.
Robert Walser
Fue el amor loco, el amor prudente: el amor.
Simone de Beauvoir
Soy un fantasma que desea lo que todos los fantasmas -un cuerpo- después del largo tiempo que estuve cruzando avenidas inodoras del espacio sin vida al no olor incoloro de la muerte...
William Burroughs