Mirándome se camufla la rana.
Kobayashi Issa
La esperanza es el mejor médico que yo conozco.
Alejandro Dumas
Quizá lo mejor del futuro es que sólo llega un día a la vez.
Anónimo
La desigualdad no se reduce con asistencia, sino con incentivos para crear riqueza.
Daniel Lacalle Fernandez
Las grandes empresas se basan en grandes productos.
Elon Musk
El cielo no vende los bienes al precio de nuestros trabajos.
Epicarmo
En llegando uno a viejo no quisiera morir nunca, y es que entonces todos los hilillos que nos ligan a la tierra son cables.
Eugénie de Guérin
El tiempo de ser súbditos, de estar todos calladitos ya acabó.
Federico Mayor Zaragoza
Y padeció la certidumbre espantosa de que no volvería a dormir en el resto de su vida.
Gabriel García Márquez
Cuando eres un constructor de barcos, nadie te presta atención. Pero cuando eres el dueño de los Yankees de Nueva York... lo hacen, y me encanta.
George Steinbrenner
(Jealous guy) Mi canción escrita en la India. La letra la explica claramente; yo era un tipo muy celoso y posesivo, hacia todo, muy inseguro. Un tipo que quiere poner a su mujer en una pequeña caja, encerrarla y sacarla solo cuando sienta ganas de jugar con ella. A ella no le es permitido de comunicarse con el mundo fuera -fuera de mi- porque lo hacía sentir inseguro.
John Lennon
Yo no tengo ideas, sólo tengo palabras y silencios.
Marguerite Duras
¿Qué influencia puede ejercer sobre mí esta opinión vulgar? Esta opinión no nos afecta sino en razón de nuestra sensibilidad; pero si a fuerza de sabiduría y reflexión, logramos ahogar esta sensibilidad hasta el punto de no sentir sus efectos, incluso en las cosas que nos conciernen más directamente, resultará imposible que la opinión buena o mala de los otros, pueda influir en nuestra felicidad.
Marqués de Sade
Sabía que, en ocasiones, algo de miedo puede ser bueno. Si temes que las cosas empeoren si no haces nada, eso te puede mover a la acción. Sin embargo, de nada sirve estar tan asustado que el miedo te impida actuar.
Spencer Johnson
Publicidad: la ciencia de arrestar la inteligencia humana el tiempo suficiente para obtener dinero de ella.
Stephen Leacock
Hay entre nosotros un mar de lágrimas con rugientes olas y no puedo llegar hasta ti.
Yehuda Haleví