Si no hubiera sido por la guerra, no valoraría la paz. Si no hubiera sido por el dolor, no conocería el poder sanador del amor. Si no hubiera sido por el odio, nunca habría aprendido a perdonar. Si no hubiera sido por el encarcelamiento, no valoraría la libertad. Si no hubiera sido por la vida en necesidad, no valoraría todo lo que tengo. Si no hubiera sido por miedo, no valoraría la paz.