Ya sé Kung fú.
Keanu Reeves
El deber del superviviente es dar testimonio de lo que ocurrió, hay que advertir a la gente de que estas cosas pueden suceder, que el mal puede desencadenarse. El odio racial, la violencia y las idolatrías todavía proliferan.
Elie Wiesel
Artículo quinto. -Comer en la misma mesa con un sacerdote le hace quedar a uno expulsado: con ello uno se excomulga a sí mismo de la sociedad honesta. El sacerdote es nuestro chandala- se le proscribirá, se lo hará morir de hambre, se lo echará a toda especie de desierto.
Friedrich Nietzsche
Verdaderamente te digo hoy: Estarás conmigo en el Paraíso.
Jesús de Nazaret
El que piensa que dirige y no tiene a nadie siguiéndole, sólo está dando un paseo.
John C. Maxwell
Bajo los reyes, gobiernan las mujeres, bajo las reinas, los hombres.
John Stuart Mill
La genialidad es una coincidencia. Surge como chispa luminosa en el punto donde se encuentran las más excelentes aptitudes de un hombre y la necesidad social de aplicarlas al desempeño de una misión trascendental.
José Ingenieros
Es que no hace falta entender el catalán, yo me llamo, como me llamo aquí y en la China Popular, y en la otra, y usted perdone que se lo diga, no tiene ningún derecho a modificar mi nombre. Yo me llamo Josep Lluis, no de otra forma.
Josep-Lluís Carod-Rovira
¡Os daré una que cuando despertéis vuestra ropa estará pasada de moda!
Josh Brolin
Dad al poder ejecutivo todo el poder posible, pero dádselo por medio de una constitución. Lo peor del despotismo no es su dureza, sino su inconsecuencia, y sólo la Constitución es inmutable.
Juan Bautista Alberdi
¿Para qué serviría arrepentirse de una acción, de la naturaleza que ésta fuere, si nos ha producido una satisfacción y que no tiene ninguna consecuencia desagradable?
Marqués de Sade
La voluntad necesita ser más fuerte que la habilidad.
Muhammad Ali
La organización de marketing tendrá que redefinir su papel: ya no manejar las interacciones con los clientes, sino integrar todos los procesos de la empresa que tienen que ver con los clientes.
Philip Kotler
Tras levantarte de la cama, enrolla los cobertores y allana el lugar donde yaciste.
Pitágoras
Allí estaba yo, dispuesto a arrostrar todos los peligros, a desafiar todas las leyes divinas y humanas, a asesinar si fuera necesario y a meterme en complicaciones inextricables y horribles ( ¿Qué me importaba a mí? ), por una mujer de la que no sabía más que era tan hermosa como imprudente.
Sheridan Le Fanu
Los tigres de la ira son más sabios que los caballos de la instrucción.
William Blake