Solo una cosa me molestaría: mi propio desprecio. Pero, naturalmente, no me puedo escupir a la cara.
Jules Renard
El amor está antes que usted. Ámelo.
André Breton
Los optimistas, llenos de fútiles pensamientos y poseídos de esperanzas insubstanciales, siembran de ordinario la inútil semilla que produce la mala hierba. Los pesimistas achican y entristecen la vida, pero no la corrompen.
Antonio Cánovas del Castillo
A veces la belleza de una abuela determina la muerte de sus nietos o la ruina de sus descendientes. Una mentira pesa durante generaciones y sus consecuencias son imprevistas e infinitas. Enfrentarse al reflejo del pasado produce el exacto pasado y buscar el origen de la derrota produce la antigua derrota.
Elena Garro
Si había esperanzas, estaba en los proles. Esta era la idea escencial. Decirlo, sonaba a cosa razonable, pero al mirar aquellos pobre seres humanos, se convertía en una acto de fe.
George Orwell
El hombre está dispuesto a morir por cada idea, siempre que no tenga una idea muy clara de ella.
Gilbert Keith Chesterton
El sabio es quien quiere asomar su cabeza al cielo; y el loco es quien quiere meter el cielo en su cabeza.
¡Estoy hasta los cojones de la pensión compensatoria, de los jueces y de la bruja de su madre!
Hugo Silva
El que tiene la verdad en el corazón no debe temer jamás que a su lengua le falte fuerza de persuasión.
John Ruskin
¡Llorad, llorad, arcángeles hundidos.
Juan Antonio Villacañas
Si sus sentimientos son los mismos que en abril, dígalo de una vez, una palabra suya me silenciara para siempre. Si sus sentimientos hubiesen cambiado, tendría que decirle que me ha hechizado en cuerpo y alma y la amo, la amo, la amo, no quiero estar sin usted otro día.
Matthew Macfadyen
Hay un dirigente de ellos que nos dijo, casi en una actitud de caradurismo, que paguemos el lomo 80 pesos como los uruguayos, qué poco le importan los argentinos.
Néstor Kirchner
La envidia, el más mezquino de los vicios, se arrastra por el suelo como una serpiente.
Ovidio
Ver la paja en el ojo ajeno, y no la viga en el propio.
Proverbio
Los seres humanos no pueden permitirse el lujo de ser fanáticos de nada. Ni siquiera de la justicia o la lealtad. El fanático de la justicia termina por asesinar a un millón de indefensas personas para limpiar un espacio para sus tribunales de la ley. Si queremos sobrevivir en este planeta, debe haber compromisos.
Storm Jameson
Los ojos son arcabuces y lumbreras del alma.
Vicente Espinel