Frase de Judith Butler

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Si Lacan reconoce que la homosexualidad de la mujer procede de una heterosexualidad decepcionada -como se afirma que lo demuestra la o... - Judith Butler

Si Lacan reconoce que la homosexualidad de la mujer procede de una heterosexualidad decepcionada -como se afirma que lo demuestra la observación-, ¿No sería igual de evidente para el observador que la heterosexualidad procede de una homosexualidad decepcionada?

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Venimos de la nada, tenemos hijos que se encuentran atados a este infierno al igual que nosotros, y volvemos a la nada.

Adviértase que no trato de pergeñar una biografía. No tengo preparación para el caso. Si la tuviera, no la escribiría tampoco.

Es imposiblepreocuparse de otra cosa cuando sangras.

Para los que buscan grandeza la resistencia será una constante con muchos disfraces. Estará esperando a escondidas y se quedará con los asustadizos y los ignorantes.

El corazón necesita ausencias para alimentar el deseo.

Paz es anarquía. Gobierno es fuerza; fuerza es represión, y la represión lleva a la reacción y a las naciones a la guerra. La guerra existirá en tanto exista el Estado. Sólo una sociedad anarquista puede ofrecer las condiciones económicas, éticas y psicológicas bajo las cuales será posible la formación de una mentalidad pacifica.

Hay por lo menos dos vías de acceso diferentes relacionadas con esta cuestión de consagrar o cargar el talismán con un tipo específico de energía. El primer método se basa en cierto tipo de meditación, el segundo es una consagración mágica ceremonial.

Israel Regardie

No sé cómo no los advirtieron, cómo no se sintieron quemados ni traspasados, mis ojos debían ser como ascuas o agujas.

El perdón estaba cerca y que este le llegaría a los arrepentidos porque Yahvé será misericordioso con los hombres que tienen fe.

La filosofía no es un simple juego de mesa. Se trata de quiénes somos y de dónde venimos.

Jostein Gaarder

Como la masa del pueblo es inconstante, apasionada e irreflexiva, y se halla además sujeta a deseos desenfrenados, es menester llenarla de temores para mantenerla en orden. Por eso los antiguos hicieron bien en inventar los dioses y la creencia en el castigo después de la muerte. Son más bien los modernos los que deben ser acusados de locura por su pretensión de extirpar tales creencias.

Aunque avergüence decirlo, sólo pensamos en la virtud cuando no tenemos otra cosa que hacer.

Las decisiones rápidas son decisiones inseguras.

Suele ser el equipo mejor preparado el que gana el juego.

Su cuerpo había sido macerado hasta tal punto de que ahora sólo le quedaban los nervios. Su cuerpo estaba extendido como un velo sobre una roca.

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