Usted, Eminencia, ha sido un profeta pero mi pontificado será breve.
Juan Pablo I
El ojo que tú ves no es ojo porque tú lo veas, es ojo porque él te ve.
Antonio Machado
Sólo tengo una ambición: ver a la humanidad toda junta, negros, blancos, todo el mundo viviendo juntos.
Bob Marley
Voló tan alto su pensamiento que tuvo que darlo por perdido.
Carlos Rivera Ortiz
Aquel que es demasiado precavido realiza muy poco en la vida.
Friedrich Schiller
Lo único que canto es la verdad, la realidad de las cosas. Yo no entiendo por qué la gente se asusta si todo lo que dicen mis canciones, es el pan nuestro de cada día.
Gloria Trevi
A partir de mi revisión de los artículos y mi experiencia personal en la mayoría de los así llamados Centros de SIDA en África, no encuentro en absoluto ninguna prueba convincente de que África esté en medio de una nueva epidemia de Inmunodeficiencia infecciosa.
Harvey Bialy
El mejor cumplido que he recibido en mi vida vino del Presidente Mao de China. Cuando fui allí, en un momento en que nadie quería tocar a China con un poste de 10 pies, Mao me dijo que soy hermosa porque soy natural, y me dijo que es natural de la perfección. Por lo tanto, no hay difamación puede disminuir a mí ya mi perfección.
Imelda Marcos
Y se nos irá la vida sin sentir otro rumor que el del agua de las horas que se lleva el corazón.
Jaime Bodet
Dale a un hombre un arma y robará un banco, dale un banco y robará el mundo entero.
Juan Gómez-Jurado
¿Culé yo?. Sí, soy de Vilanova i la Geltrú, ¡no te digo!
Manuel Preciado
La búsqueda de dios es una ocupación inútil, pues no hay nada que buscar donde nada existe. A los dioses no se les busca, se les crea.
Máximo Gorki
Se ha clausurado mi sala de baile, mi corazón no tiene ya la música de todas las playas de hoy más tendrá el silencio de todos los siglos.
Salvador Novo
La apariencia posee la plenitud de la realidad, pero sólo en cuanto apariencia. En cuanto cosa distinta de apariencia, es error.
Simone Weil
El eterno retorno de las cosas es bien conocido por los niños.
Walter Benjamin
El precio de las cosas debería depender de su mérito, jamás de su epíteto.
William Shakespeare