Estaré vivo para entregarte tu quinto trofeo mundial. (a Senna)
Juan Manuel Fangio
El humor trae conocimiento y la tolerancia. La ironía aporta una comprensión más profunda y menos amigable.
Agnes Repplier
Tanto el que te envenena como el que te descalifica tratará por todos los medios de que no alcances tus sueños, y se encargará de boicotear cada uno de tus proyectos. Su lema es: Si yo no puedo, él tampoco.
Bernardo Stamateas
La filosofía es el cultivo de las facultades mentales. Desarraiga nuestros vicios y prepara el espíritu para recibir la semilla adecuada.
Cicerón
La pelota no se mancha.
Diego Armando Maradona
Presta oídos al mundo que yace en algún rincón de ti mismo y que no precisa mostrarse para ser.
Emil Cioran
El único Amo es el deseo. El verdadero amo de cada uno de nosotros es aquel que tiene el poder de darnos o no, quitarnos o no, lo que deseamos o no. Todo hombre entonces, que quiere ser libre, no desea y no rechaza nada que dependa de otros, de lo contrario, necesariamente será esclavo.
Epicteto
Lo más seguro es dar a cada uno algo que defender.
Georges Clemenceau
No hay papeles pequeños, sólo hay artistas pequeños.
Konstantin Stanislavski
Señor presidente del Gobierno, señoras y señores diputados... Bien. Han sido... (Risas. Aplausos. Alguien grita: '¡Mariano, tonto!') No me refería a ninguno de ustedes, no sé por qué aplauden.
Mariano Rajoy
A los jóvenes lectores hay que darles primero algo que puedan amar, y una vez que lo amen, entonces pueden aprender cómo es la literatura.
Orson Scott Card
La perseverancia constituye las nueve décimas partes de cualquier arte... Aunque no sirva de mucho ser nueve décimas partes de artista, por supuesto.
Peter S. Beagle
Controlar la precisión. Ser yo mismo un instrumento de precisión.
Robert Bresson
Nos posamos aquí tal como somos en realidad, y cuando la página se vuelve y nos revela otra realidad, esa parte que preferimos pasar en silencio, ya no estamos de acuerdo.
Stanisław Lem
Toda grandeza es inconsciente, o es poco y nada.
Thomas Carlyle
Mi corazón late con fuerza y sabe por qué. No late solamente por razones físicas, no late por la misma razón que las uñas de un cadáver continúan creciendo, late humanamente, y en verdad se siente feliz.
Thomas Mann