Aquel si viene o no viene, aquel si sale o no sale, en los amores no tiene contento que se iguale.
Juan de Timoneda
La más noble oración se logra cuando el orante se transforma, allá, en lo más íntimo, en aquello delante de lo cual se arrodilla.
Angelus Silesius
El demonio es manejado por Moscú.
Augusto Pinochet
Lo último que vi del conde Drácula fue su terrible mirada, con una luz roja de triunfo en los ojos y con una sonrisa de la que Judas, en el infierno, podría sentirse orgulloso.
Bram Stoker
La maravilla de un solo copo de nieve supera la sabiduría de un millón de meteorologistas.
Francis Bacon
Ahora os pido perderme y encontraros a vosotros mismos. Sólo cuando me hayáis repudiado volveré a estar con vosotros.
Friedrich Nietzsche
Muchos se muestran orgullosos de lo que saben y presuntuosos con lo que ignoran.
Goethe
Aprender a ver y a valorar lo que se tiene -lo bueno y lo malo- es una regla imprescindible para tomar decisiones adecuadas.
José Antonio Marina
Desearía que mi corazón fuese depositado en el de Buenos Aires.
José de San Martín
No hay que tener miedo a perder. De hecho, yo he perdido mucha más carreras de las que he ganado.
Miguel Indurain
El amor, esencia de Dios, no se hizo para la ligereza, sino para la completa dignidad del hombre.
Ralph Waldo Emerson
Un activo es algo que pone dinero en tu bolsillo. Un pasivo es algo que extrae dinero de tu bolsillo. Esto es, en realidad todo lo que necesitas saber. Si deseas ser rico, simplemente pasa tu vida construyendo activos.
Robert Kiyosaki
El que se aviene con la pobreza, es rico.
Séneca
-Emisión en Memoria del Valle de Koom -leyó-. ¡Pero no queremos que lo recuerden! ¡Queremos que lo olviden!
Terry Pratchett
Me levanto un día normal y quiero salir a comer con mi novia. Luego alguien se queda mirándome por un rato, se me acerca y me pide por un autógrafo. Está bien lo hago, pero en el fondo pienso que quiero estar tranquilo, con mi novia y sin que nadie invada mi espacio. No quiero sonar pretencioso, pero eso me sucede mucho.
Thom Yorke
Sus lágrimas son más bellas que su sonrisa.
Thomas Campbell