La muchedumbre del pueblo alborotado nunca se sabe templar; o temen o espantan, y proceden en sus cosas desapoderadamente.
Juan de Mariana
No hay ventura ni desgracia en el mundo, sino la comparación de un estado con otro, he ahí todo. Sólo el que ha experimentado el colmo del infortunio puede sentir la felicidad suprema. Es preciso haber querido morir, amigo mío, para saber cuán buena y hermosa es la vida.
Alejandro Dumas
Un noble ejemplo es más eficaz que los preceptos.
Ben Jonson
Si falta la diplomacia, recurrid a la mujer.
Carlo Goldoni
Más vale vivir tu propio destino imperfectamente que vivir a la perfección el destino de otra persona.
Elizabeth Gilbert
El diablo es un egoísta, y no hace fácilmente por amor de Dios lo que resulta en beneficio de otro.
Goethe
Más que por la A de amor estoy por la A de asma, y me ahogo de tu no aire, ábreme alta mía única anclada ahí, no es bueno el avión de palo en el que yaces con vidrio y todo en esas tablas precipicias, adentro de las que ya no estás, tu esbeltez ya no está, tus grandes pies hermosos, tu espinazo de yegua de Faraón, y es tan difícil este resuello, tú me entiendes: asma es amor.
Gonzalo Rojas
Para ver algo con precisión hay que mirarlo dos veces; para ver su belleza no hay que mirarlo más que una vez.
Henri-Frédéric Amiel
Al reino acostumbrado largo tiempo a tener paz, suele faltarle nervios para sustentar la guerra.
Joaquín Setantí
Somos sostenedores definidos del ideal de un nuevo mundo en América.
José Figueres Ferrer
Lo que se compra al precio de muchos ruegos es demasiado caro.
Juan Luis Vives
Lo más fascinante de un viaje no sólo es descubrir otra cultura, sino experimentar el extraño proceso de conocer mejor la propia a través de la comparación.
Juanjo Braulio
¿Qué es nuestra imaginación comparada con la de un niño que intenta hacer un ferrocarril con espárragos?
Jules Renard
Ella es luz en las horas inciertas, sostén cuando todo parece perdido.
Nikolái Gumiliov
La vida es un deber cumplelo.
Teresa de Calcuta
Las maquinas voladoras mas pesadas que el aire son imposibles.
William Thomson