Si tengo que decir de dónde vengo.
Juan Antonio Villacañas
Cuando se alza un poder ilegítimo, para legitimarlo basta reconocerlo.
Anatole France
No eres simplemente un humano: eres un ser humano. Reconoce tu propio valor y siempre recuerda que mereces buen trato.
Andrew Matthews
El laicismo no puede ser una religión universal, porque es parcial y no responde a las preguntas del ser humano.
Benedicto XVI
El color es mi obsesión diaria, la alegría y el tormento.
Claude Monet
Las cartas son como paquetes que contienen sorpresas.
Doménico Cieri Estrada
No hay que olvidar que el primer deber, en el matrimonio, es hacerse perdonar que uno está allí.
Jean Rostand
Las bienaventuranzas no hacen depender la felicidad de ningún suceso venturoso ni de acontecimientos agradables que nos puedan suceder.
José Antonio Pagola
Esos desgraciados qué pueden tranquilamente entrar dentro de sí mismos, mirarse, por decirlo así, frente a frente, y estrecharse las manos con la noble efusión de dos amigosleales, deben ser muy felices.
José Selgas
La filosofía no es un simple juego de mesa. Se trata de quiénes somos y de dónde venimos.
Jostein Gaarder
Ha puesto verdadero interés en la tecnología, te lo aseguro. Por otra parte, allí también hacen mucha programación. Ya sabes, ciclos iterativos para perfeccionar el proceso de fabricación. Asentí con la cabeza. - ¿Qué clase de programación? - pregunté. - Procesamiento distribuido. Redes multiagente. Así mantenemos coordinadas las unidades independientes, para que funcionen de manera conjunta.
Michael Crichton
Cuando un niño comienza a sonreír, con una pequeña bifurcación de amargor y dulzura, las orillas de su sonrisa desembocan sin burlas en la anarquía del océano. Se siente mejor que nadie: juega a la gloria con los ángulos de la boca y ya cose la sutura irisada al conocimiento infinito de la realidad.
Ósip Mandelshtam
Los ladrillos saben esperar.
Ramón Gómez de la Serna
Nuestra historia no es tan buena, ni es tan mala, y aunque lo parezca no es la equivocada. Nuestra Historia.
Roque Valero
Acuérdate de mi esta noche, su voz sonó frágil y delgada y muy lejana.
Virginia Woolf
Yo lucho porque el derecho internacional reconoce mi derecho.
Xanana Gusmão