También en las almas que parecen más perdidas queda, hasta el final, la capacidad de volver a amar a Dios.
Josemaría Escrivá de Balaguer
No se accede a la verdad sino a través del amor.
Agustín de Hipona
Todo lo que puedo ser para ti es una oscuridad que conocemos.
Amy Winehouse
El espíritu de propiedad es el más fuerte aguijón que conocen los civilizados; se puede, sin exageración, estimar en un doble del trabajo servil o asalariado el producto del propietario.
Charles Fourier
La ciencia sola no es capaz de responder todas las preguntas y, pese a su desarrollo, jamás lo será.
Claude Lévi-Strauss
Comúnmente se piensa en la muerte como en una exposición de escultura: suponiendo que va a ir a ella todo el mundo menos uno mismo.
Enrique Jardiel Poncela
En la vida hay algo peor que el fracaso: el no haber intentado nada.
Franklin D. Roosevelt
El único egoísmo aceptable es el de procurar que todos estén bien para estar uno mejor.
Jacinto Benavente
No se puede ganar una guerra, como tampoco se puede ganar un terremoto.
Jeannette Rankin
Solía vivir en una habitación llena de espejos, todo lo que veía era yo.
Jimi Hendrix
Si cooperas a salvar un alma, aseguras la tuya propia.
Juan Bosco
Le salvé la vida y, cuando se salva la vida de alguien, es obligado quererlo.
Lucy Montgomery
La conversación es el contexto básico en que se produce toda persuasión.
Malcolm Gladwell
Si uno elogia a quien lo elogia, parece una amabilidad exagerada que no es aprobada.
Marcelo Bielsa
Andan el placer y el pesar tan aparejados, que es simple el triste que se desespera y el alegre que se confía.
Miguel de Cervantes
La soberbia es el vicio más frecuentemente castigado, y, sin embargo, el más difícil de curar.
Niccolò Tommaseo