Obedecer..., camino seguro. - Obedecer ciegamente al superior..., camino de santidad. - Obedecer en tu apostolado..., el único camino: porque, en una obra de Dios, el espíritu ha de ser obedecer o marcharse.
Si no has de amarme, dime que retire de ti mi admiración; si no he de amarte, haz que nunca te mire.