Yo sé a simple vista cómo ha de tratarse una posición, lo que puede ocurrir, lo que va a suceder; otros hacen ensayos, pero yo sé, yo sé.
José Raúl Capablanca
Para comprender la seguridad no hay que enfrentarse a ella, sino incorporarla a uno mismo.
Alan Watts
No importa cuánto dura la vida, ni cuán rápido pasa. Lo trascendente es lo que hacemos con ella.
Anónimo
Si te empeñas, tú mismo puedes ser tan peligroso como cualquiera que se cruce en tu camino.
Arturo Pérez-Reverte
Si te olvido es porque me acuerdo de ti demasiado bien.
Ivan Malinowski
No podría decirte qué momento, qué lugar, qué mirada o qué palabra sirvieron de base. Hace ya demasiado tiempo. Lo que sí sé decirte es que para cuando me di cuenta ya estaba metido hasta el cuello.
Jane Austen
Detrás de esta Iglesia, hecha de sangre y barro que ve ante usted, hay otra Iglesia, infinita e invisible, cuyos estandartes se alzan fuertes hacia el cielo. Esa Iglesia vive en las almas de los millones de fieles que aman a Cristo y su mensaje. Resurgirá de sus cenizas, llenará el mundo y las puertas del Infierno no prevalecerán contra ella.
Juan Gómez-Jurado
Mi hijo mayor tiene 62 años, en cualquier momento me pasa.
Juan Verdaguer
En Roland Garros nadie quiere que tu ganes, y si ganas nadie te felicita. Nadie te pesca en verdad.
Marcelo Ríos
Aléjate de la gente que trata de empequeñecer tus ambiciones. La gente pequeña siempre hace eso, pero la gente realmente grande, te hace sentir que tú también puedes ser grande.
Mark Twain
Tres cosas necesitan ser excesivas para ser apenas suficientes: la compasión, la honradez y la propiedad.
Numa Boudet
Solidario por predestinación y por oficio. Solidario por atavismo, por convencionalismo. Solidario a perpetuidad. Solidario de los insolidarios y solidario de mi propia solidaridad.
Oliverio Girondo
Yo no he encontrado a un futbolista, a un deportista de alto nivel, que no le guste aquello que hace.
Pep Guardiola
No le profesa amistad verdadera y pura sino quien habla la verdad y le aconseja el bien.
Simón Bolívar
Estos cuatro elementos son los gérmenes naturales de la religión: la creencia de que los espíritus existen, el desconocimiento de causas secundarias, la veneración a todo aquello que produce miedo y la predicción de lo que sucederá en el futuro a partir de situaciones accidentales.
Thomas Hobbes
Lo cierto es que el lugar continúa todavía bajo la influencia de alguna fuerza mágica, que domina las mentes de todos los habitantes, obligándolos a obrar como si se encontraran en una continua ensoñación.
Washington Irving