Como decimos en Portugal, ellos trajeron un autobús y lo dejaron frente a su portería.
José Mourinho
La fe no se opone a vuestros ideales más altos, al contrario, los exalta y perfecciona.
Benedicto XVI
Cecil B. de Mille está rodando Los diez mandamientos, pero tiene un pequeño problema con la censura: de los diez, hay dos mandamientos que no lo dejan filmar.
Bob Hope
Eratóstenes criticó a Aristóteles por su ciego chovinismo, creía que en todos los países había cosas buenas y malas.
Carl Sagan
La belleza del cuerpo es simplemente animal, a no ser que vaya acompañada de la inteligencia.
Demócrito
Yo no escribo para el orgulloso aparte de la luna que está bramando en estas páginas de rocío marino ni para los muertos imponentes con sus ruiseñores y salmos sino para los amantes, cuyos brazos rodean las penas de todos los tiempos, quienes no me pagan con alabanzas ni monedas ni prestan atención a mi oficio o arte.
Dylan Thomas
La muerte arrebata primero a los mejores, y deja a los culpables.
Francesco Petrarca
El amor a uno solo es una barbarie, pues se practica a costa de todos los demás. También el amor a Dios.
Friedrich Nietzsche
España, el bello pais del vino y las canciones.
Goethe
Cuando una situación empeora, es más fácil encontrar culpables que inocentes; intrigantes que remedios.
Jean-François Revel
Las mujeres hacen grandes esfuerzos por salir de la imagen que se les ha impuesto. Pero hay suficiente verdad en ésta para que su repudio implique el repudio de una parte de ella que es cierta.
Marilyn French
Siempre me he identificado con Lucifer porque él quería ser Dios y no iba a aceptar las reglas de otro. Entonces, lo echaron del cielo y creó sus propias reglas. Si la otra parte hubiera escrito la Biblia, Lucifer sería nuestro salvador.
Marilyn Manson
Se despidieron y en el adiós ya estaba la bienvenida.
Mario Benedetti
Vale la pena vivir, aunque fuera solo porque sin la vida no podríamos leer ni fantasear historias.
Mario Vargas Llosa
Non credo che la religión sea útil.
Terry Jones
El paraíso terrenal está donde yo estoy.
Voltaire