Si queréis conocer la ingratitud del hombre, oídlo hablar de la mujer.
José María Vigil
Quien nunca ha cometido un error nunca ha probado algo nuevo.
Albert Einstein
Busca la simplicidad, y la desconfianza.
Alfred North Whitehead
Las pasiones tienen causas y no principios.
Antístenes
El cristianismo no ha conquistado el nacionalismo, al contrario, el nacionalismo ha hecho del cristianismo su taburete.
Arthur Keith
Me opongo a toda superstición, sea musulmana, cristiana, judía o budista.
Bertrand Russell
El hedonismo, la idea del placer como modo de vida, se ha convertido en la justificación cultural, si no moral, del capitalismo.
Daniel Bell
Es mayor la pereza de nuestro espíritu que la de nuestro cuerpo.
François de La Rochefoucauld
Por el solo hecho de formar parte de una multitud, desciende, pues, el hombre varios escalones en la escala de la civilización.
Gustave Le Bon
Cultiva en silencio tu blanco jardín interior, y la ortiga que alcance tu huerto conviértela en flor.
Ildemaro Urdaneta
Ciertas creencias que no percibimos no por ello son asimilables a un puro vacío, como no lo es el aire que nos envuelve; componen a nuestro alrededor una atmósfera variable, a veces excelente, a menudo irrespirable, y merecerían ser anotadas con tanto cuidado como la temperatura, la presión barométrica o la estación, pues nuestros días tienen su originalidad física y moral.
Marcel Proust
Todo lo que existe puede concebirse solo, o no puede concebirse solo. No hay término medio, pues las dos proposiciones son contradictorias. Ahora bien, todo lo que podemos concebir solo, sin pensar en algo más, como existiendo independientemente de otra cosa, o sin que la idea que tenemos de ellos represente nada más, es sin duda un ser o una sustancia.
Nicolas Malebranche
La puntualidad es una pérdida de tiempo.
Oscar Wilde
Hay dos tipos de estadísticas: las que lees y las que haces.
Rex Stout
Ya sólo chocaron tu cuerpo y el mío como dos pedernales. Al amanecer me sorprendí de que respiraras todavía.
Roberto Obregón
Ser completamente honrados consigo mismo es un buen ejercicio.
Sigmund Freud