La vida no es sólo el trabajo, sino el descubrimiento constante de ilusiones y de esperanzas.
José María Setién
La tontería prueba que hay Dios porque infinita y eternamente nueva ella misma se imita.
Armando Uribe Arce
Cuando al tirano se le puede llamar tirano el humor deja de ser necesario.
Cándido
No estás deprimido, estás distraído, distraído de la vida que puebla. Distraído de la vida que te rodea: delfines, bosques, mares, montañas, ríos.
Facundo Cabral
La vida en sí es el más maravilloso cuento de hadas.
Hans Christian Andersen
La gente joven está convencida de que posee la verdad. Desgraciadamente, cuando logran imponerla ya ni son jóvenes ni es verdad.
Jaume Perich
Cuando un mono se mira al espejo, ve un mono. En eso son superiores a los humanos.
Jean Cocteau
No hay normas o muestras para la producción de una gran obra de arte. No sería arte sino fabricación sobre medida.
John Ruskin
Tenemos que buscar un sistema que sea mejor que la disuasión nuclear para impedir la guerra. Pero sería una pretensión peligrosa insinuar que dicho sistema esté actualmente al alcance de Oriente y Occidente.
Margaret Thatcher
Algunas veces incluso vivir es un acto de coraje.
Séneca
No sé de qué trata mi vida ni quiero saberlo. Mi vida se define a sí misma cuando la vivo. Las películas se definirán a sí mismas cuando las haga.
Sidney Lumet
Te amaré, te amaré como al mundo, te amaré aunque tenga final, te amaré, te amaré en lo profundo. Te amaré como tengo que amar, te amaré, te amaré como pueda, te amaré, aunque no sea la paz.
Silvio Rodríguez
Dado que existe una ley como la de la gravedad, el universo pudo crearse a sí mismo de la nada, como así ocurrió. La creación espontánea es la razón de que exista algo, en vez de nada, de que el universo exista, de que nosotros existamos. No es necesario invocar a dios para que encienda la mecha y ponga el universo en funcionamiento.
Stephen Hawking
Darse del todo al Todo, sin hacernos partes.
Teresa de Jesús
Las lágrimas que se vierten por las personas que nos fueron queridas, son saludables y aceptas al cielo, y avezan el alma a no olvidarse fácilmente de las virtudes y sagrada imagen de los muertos.
Ugo Foscolo
Durante la ausencia de la mujer amada las tinieblas, totalmente enloquecidas, se apoderan de sus piernas, se deslizan en los zapatos de hielo y empiezan a bailar desde tu cama hasta la inmensa sala del insomnio.
Vladimír Holan