Sólo hay juventud en los que trabajan con entusiasmo para el porvenir; por eso en los caracteres excelentes puede persistir sobre el apeñuscarse de los años.
José Ingenieros
Mi prioridad permanente es la compañía. Lo mío es vocación empresarial. El empresario de antes no me gustaba.
Amancio Ortega
Prefiero vivir un día en la tierra que cien años en la historia.
Anónimo
Si quieres vivir en paz, escucha, observa y calla.
¿Qué otra cosa soy yo que un arroyuelo hecho de dulces sílabas contadas, que un curso se ha labrado entre la gente a fuerza de sonrisas y de lágrimas?
Baldomero Fernández Moreno
Y sin embargo, el aire está cargado de flores que no son; sin embargo, ya han abierto en un cielo radiante.
Charles Van Lerberghe
La soledad no me debilita, me fortalece, me llena de algo extraño que me nutre, me habla de noche, me cuenta cuentos, historias que son verdad, que son verdades.
Chavela Vargas
El carácter es la profunda configuración educativa de la matriz personal con que el niño nace.
José Antonio Marina
Es verdad, y este es el consuelo del justo, del héroe y del sabio; el destino sólo tiene imperio en ellos por el bien que ellos hacen. Los demás hombres son ciudades de cien puertas abiertas por las cuales cualquier cosa puede penetrar; pero el justo es una ciudad cerrada que sólo tiene una puerta de luz, y el destino no puede abrirla más que cuando logra que el amor llame a esta puerta.
Maurice Maeterlinck
Debemos escuchar al niño que fuimos un día y que existe dentro de nosotros. Ese niño entiende de instantes mágicos.
Paulo Coelho
El silencio es retórica de amantes.
Pedro Calderón de la Barca
El amor es un espíritu dentro de dos formas.
Percy Bysshe Shelley
Mi preocupación ha sido siempre pintar desnudos como si fueran unos espléndidos frutos.
Pierre-Auguste Renoir
La discusión es mi Beatriz.
Rodrigo Mauregui
Aférrate a la Biblia. A la influencia de este libro en que estamos en deuda para todo el progreso hecho en la civilización y para ello debemos verla como nuestra guía en el futuro.
Ulysses S. Grant
Dios nos regaló estos descansos.
Virgilio