Navega, velero mío, sin temor, que ni enemigo navío ni tormenta, ni bonanza tu rumbo a torcer alcanza, ni a sujetar tu valor.
José de Espronceda
Es preciso matar el tiempo. Si bien se considera, ésa es la única ocupación de nuestra vida.
Anatole France
Ninguna forma de gobierno existente, ninguna forma de gobierno que haya existido nunca, da o ha dado una proporción tan grande de libertad individual como una monarquía constitucional en la que la corona ha sido despojada del poder político directo.
Anthony Trollope
Me gusta extraviarme a mí mismo a través de otras mentes. Cuando no estoy pensando, estoy leyendo. Soy incapaz de sentarme y ponerme a pensar. Los libros piensan por mí.
Charles Lamb
¿Es que no bastaba ver la belleza de un jardín, sin tener que creer por ello que estaba habitado por las hadas?
Douglas Adams
La nostalgia es un perro perseguidor que le muerde los talones.
Eduardo Galeano
El teatro es un gran medio de educar al público; pero el que hace un teatro educativo se encuentra siempre sin público al que poder educar.
Enrique Jardiel Poncela
El hombre se eleva por la inteligencia, pero no es hombre más que por el corazón.
Henri-Frédéric Amiel
Un cuento es una novela depurada de ripios.
Horacio Quiroga
Probablemente el mayor artista de cine, en definitiva, desde la invención de la cámara de cine.
Ingmar Bergman
Cuando el proletariado está unificado, las capas de la población trabajadora se sienten atraídas por la sensación de fuerza y de firmeza que da en su lucha.
José Díaz Ramos
¿Por qué? ¿Por qué Ovrebo, De Bleeckere, Busacca o Stark? En cada semifinal pasa lo mismo. Estamos hablando de un equipo, el Barça, absolutamente fantástico, pero ¿por qué no pudo ir a la final el Chelsea hace dos años? ¿Por qué el Inter se salvó haciendo el verdadero milagro de aguantar con diez tanto tiempo? ¿Por qué tiene este poder con los árbitros? ¿Por qué? ¿Por qué?
José Mourinho
Mientras el tigre no puede dejar de ser tigre, no puede destigrarse, el hombre vive en riesgo permanente de deshumanizarse.
José Ortega y Gasset
Nada nos engaña tanto como nuestro propio juicio.
Leonardo da Vinci
Si yo hubiera creído en un Dios de recompensas y castigos, puede que hubiera perdido el ánimo en las batallas.
Marlene Dietrich
Comprendió que el regalo perfecto era justamente eso: el presente.
Spencer Johnson