Eres un puente entre los marjales de las pesadillas. Las madejas de nuestros sueños se entrelazan, estrechas desechas en lava. Tú derribas los muros coronados por trozos de botellas que sitiaban mis días.
Jorge Teillier
La palabra Dios no es para mi nada más que la expresión y el producto de debilidades humanas; la Biblia, una colección de leyendas admirables, pero también largamente primitivas que de todas formas resultan infantiles.
Albert Einstein
¿Qué hay después del después? ¿Después del fuego?
Beatriz Villacañas
Los enemigos de la patria y de las libertades de los pueblos, siempre han llamado bandidos a los que se sacrifican por las causas nobles de ellos.
Emiliano Zapata
¿Has cumplido con tu deber? Confía en el Cielo que no te abandonará.
Félix María de Samaniego
Lo único que lamento es que nunca tendré tiempo para leer todos los libros que quiero leer.
Françoise Sagan
Cuando tomaron el poder los agentes, abogados y contables, que era gente que leía el Wall Street Journal y a la que le importaban menos las películas que las acciones, todo se fue al demonio.
George Lucas
Es completamente lícito para una católica evitar el embarazo recurriendo a las matemáticas, aunque todavía está prohibido recurrir a la física o a la química.
H. L. Mencken
El poder es un gran afrodisíaco, y yo soy una persona muy poderosa.
Madonna
Es peligroso escuchar. Se corre el riesgo de que le convenzan; y un hombre que permite que le convenzan con una razón, es un ser absolutamente irracional.
Oscar Wilde
Mira, si te olvido será por autodefensa.
Pablo Hasél
Además, para educar un público hay que comenzar por tenerlo, y para tenerlo hay que halagarlo. ¿O es que te resignas a ser el único suscriptor? Un gran diario, es decir, un diario con un gran público, es un partido; cada vintén representa un voto. Y se trata de electores que dan su voto y dinero encima: ninguna política consigue tanto.
Rafael Barrett
Quiere, quiere, quiere sin parar, insiste, aguanta, rodea, da más vueltas, pide, apiada al destino con trabajos, sigue tenso de atenciones a ver lo que dicen la voz de la sangre, el signo que inscribe la ola en la arena, el silencio insigne.
Ramón de Garciasol
Siempre hay que tratar a los empleados exactamente como queremos que ellos traten a nuestros mejores clientes. Se puede comprar el trabajo de una persona, pero no se puede comprar su corazón. En el corazón están su lealtad y su entusiasmo. Tampoco se puede comprar su cerebro. Allí están su creatividad, su ingenio, sus recursos intelectuales.
Stephen Covey
Jamás ganarás un partido a menos que superes al tipo de enfrente de ti. El marcador no importa nada. Sólo vale para los aficionados. Tú tienes que ganar la guerra con el hombre que está frente a ti. Tienes que ganarle a tu hombre.
Vince Lombardi
Por cada risa, debe haber una lágrima.
Walt Disney