En mi país se pasan quince minutos diciendo que no hace falta presentarme y diciendo que van a ser breves en la presentación; y así pueden estar una hora sin haberme presentado.
Jorge Luis Borges
En las democracias, las revoluciones son casi siempre obra de los demagogos.
Aristóteles
Mediante pasos alternados de pérdida y ganancia, silencio y actividad, recorro el sendero de la inmortalidad.
Deepak Chopra
Slim Shady son sólo los malos pensamientos que vienen a mi cabeza. Cosas en las que no debería estar pensando.
Eminem
Julio. Tú quizá sueñas todavía con aquella antigua Iglesia en la que tú en compañía de algunos famélicos obispos hacías de ponttífice completamente inútil, sometido a la pobreza, al sudor, a los peligros y a mil inconvenientes.
Erasmo de Róterdam
Mantenga su rostro al sol y no verá la sombra. Es lo que hacen los girasoles.
Helen Keller
El anonimato en el mundo de los hombres es mejor que la fama en los cielos, porque, ¿qué es el cielo? ¿qué es la tierra? Todo ilusión.
Jack Kerouac
Un mal escritor es alguien cuya vida resulta más interesante que su obra.
John Irving
El hecho de que la sociedad, y el gobierno, y todo lo demás era diferente hace 100 años, no quiere decir que la gente no tenga relaciones sexuales, no pueda hurgarse uno su nariz, o que se maldiga.
Kate Winslet
Son vanas y están plagadas de errores las ciencias que no han nacido del experimento, madre de toda certidumbre.
Leonardo da Vinci
El río en el verano y un puente. Pero el caballo pasa por el agua.
Masaoka Shiki
Nada en este mundo es para siempre mas que el amor que dejamos tras marcharnos.
Mercedes Pinto Maldonado
Cuando en un gobierno, al hablarse de cosa pública, cada uno dice ¿Qué me importa?, la cosa pública está perdida.
Montesquieu
El Príncipe debe hacer uso del hombre y de la bestia: astuto como un zorro para evadir las trampas y fuerte como león para espantar a los lobos.
Nicolás Maquiavelo
Los enemigos de la democracia española son los enemigos de Francia.
Nicolas Sarkozy
Al igual que el tiempo, el espacio trae consigo el olvido; aunque lo hace desprendiendo a la persona humana de sus contingencias para transportarla a un estado de libertad originaria; incluso del pedante y el burgués hace, de un solo golpe, una especie de vagabundo.
Thomas Mann