Repudio todo pensamiento sistemático porque todo sistema conduce necesariamente a la trampa.
Jorge Luis Borges
Jamás la civilización, la tierra estuvo amenazada por tantos peligros como lo está hoy, no por seres de otros planetas, sino por vándalos terrícolas vil sirvientes del sistema que se valen de sus medios bárbaros para llamar a toda su destrucción desarrollo.
Alex Pimentel
Ni el arte de aconsejar cuadra a todos los juicios.
Alonso de Barros
Ella hace casi dos años que se fue; pero no creo que eso sea un inconveniente, seguro que la reconocerá.
Carmen Andújar Zorrilla
Solamente admitiendo la noche físicamente, se le ha llegado a aceptar moralmente. ¡Oh, noches de Young! ¡Cuántas jaquecas me habéis causado!
Conde de Lautréamont
Aprender sin pensar es tiempo perdido; pensar sin aprender es peligroso.
Confucio
La tiranía de una multitud es una tiranía multiplicada.
Edmund Burke
Cuando digo, 'salta de un puente de mierda o raja tus muñecas', no es lo que estoy tratando de decir. Es como tener la lengua en la mejilla.
Eminem
Los golpes de la adversidad son muy amargos, pero nunca son estériles.
Ernest Renan
Es muy poco probable que hasta un polipéptido resultara correctamente de la evolución darviniana, sin mencionar los miles que se necesitan para la supervivencia de células vivientes. Los genetistas saben muy bien esta situación, y, no obstante, parece que nadie pone paro a la teoría de manera definitiva.
Fred Hoyle
Es lícito establecer una ecuación perfecta entre el cristiano y el anarquista: su finalidad, su instinto tienden sólo a la destrucción.
Friedrich Nietzsche
Cuando los gobiernos se encargan de proteger a las artes, es el fin de todo.
Jean Dubuffet
Las palabras y las obras jamás hacen buena liga.
Joaquín Setantí
Así por sus altos fines dispone y permite el cielo que puedan mudar al hombre fortuna, poder y tiempo.
José Zorrilla
Me muero de curiosidad por saber qué pasará en el mundo más adelante, porque no soy pesimista, pero tampoco lo veo bien en los últimos tiempos.
Libertad Lamarque
El hombre sensato no se alegra con mucha frecuencia.
Ramon Llull