América del Sur se está haciendo, busca su rumbo, su sitio en el mundo, su liberación, la independencia. Ser cada uno: con su sentido, con su aire nacional.
Jorge Cafrune
Silencio es hablar calladamente con su propio dolor, y sujetarlo hasta que se convierta en vuelo, en plegaria o en canto.
Alberto Masferrer
La piedra filosofal es el trabajo, el ahorro y la inversión.
Anónimo
Cuando uno disfruta haciendo algo, esa misma sensación se disipa por la atmósfera como un eructo de esporas. Y la gente, que no es tonta, lo nota.
Diego Fortea
El hombre odia a quien le hace sentir su propia inferioridad.
Felipe Stanhope de Chesterfield
El escritor original no es aquél que no imita a nadie, sino aquél a quien nadie puede imitar.
François-René de Chateaubriand
La duda nuestros ímpetus refrena, abre anchuroso cauce al egoísmo, y sólo funda en movediza arena.
Gaspar Núñez de Arce
Un hombre es un hombre en la medida en que él es un superhombre. Un hombre debe definirse por la suma de esas tendencias que le impulsa a superar la condición humana.
Gaston Bachelard
Pero las palabras arden: como un sonido más allá de todo sentido, con un fulgor y hasta con un peso especialísimo.
Gonzalo Rojas
Divino es y eterno el Espíritu.
Hermann Hesse
... antojadizo, veleidoso e inconsecuente.
Mariano Rajoy
No sabe hablar quien no sabe callar.
Pitágoras
Hay cosas que uno no se las puede decir a la gente. Lo tomarían por loco. Y yo me digo: ¿Qué hago de esta vida que hay en mí? Y me gustaría darla... Regalarla... Acercarme a las personas y decirles: ¡Ustedes tienen que ser alegres!, ¿Saben?, tienen que jugar a los piratas... Hacer ciudades de mármol... Reírse... Tirar fuegos arficiales.
Roberto Arlt
¡parece haber un millón de cosas diferentes que amar en un hombre!
Salman Rushdie
Cuando se tiene una ligera dificultad como ésa, basta con desarrollar alguna otra cualidad en su lugar, la seducción... O la vivacidad... ¡O el encanto!
Tennessee Williams
No acostumbro a dar mucha importancia a las palabras de los pacientes, porque si cuando se lamentan, yo intento calmarles, se lamentan aún más. Si por el contrario, como en este caso, dicen sentirse mejor y yo muestro mi satisfacción, acaban sintiéndose mal.
Yukio Mishima