La verdad es demasiado complicada como para permitir nada más allá de meras aproximaciones.
John von Neumann
Hermanos de mi patria.
Carlos Menem
No necesito a mi padre en mi vida.
Christina Aguilera
Aunque el golf antes estaba restringido a protestantes ricos y gordos, ahora está abierto a cualquiera con un atuendo horrible.
Dave Barry
No se llega a campeón sin sudar.
Epicteto
Los hombres son naturalmente propensos a creer virtuosos a sus semejantes; esto es precisamente lo que da tanta ventaja a los impostores y a los estafadores.
Ferdinando Galiani
Ningún filósofo auténtico te exigirá que creas lo que no entiendes o lo que él no puede explicarte.
Fernando Savater
Todavía estoy aprendiendo (escrito por Francisco De Goya en un dibujo que hizo a los ochenta años).
Francisco de Goya
Algunos sueños de la adolescencia, quizá todos, están destinados a no cumplirse.
Joaquín Berges
Miami Beach es a donde van a morir las luces de neón.
Lenny Bruce
Bajo el socialismo auténtico, mi cepillo de dientes seguirá siendo exclusivamente mío, pero tu derecho a tu fábrica de cepillos de dientes será cuestionado: la conservarás si es una empresa familiar, pero si emplea a otros, los socialistas procurarán que se convierta en una empresa cooperativa poseída y administrada por sus trabajadores.
Mario Bunge
En la miseria de la memoria reconoces por primera vez a los ciegos, llenos de agua cobriza, por sus magulladuras y sigues sus huellas, tú, desconocido y desamado por ti, ciego y lazarillo al tiempo...
Ósip Mandelshtam
El dolor era lo que nadie quería tener, de ahí que todo se adornase con algodones, que todo perdiera realismo, que todo fuera falso.
Ramón Cerdá
Soy un tipo exitoso porque estoy feliz.
Ricardo Montaner
El amor es como las palomitas, solemos tragar un puñado tras otro sin darnos casi cuenta hasta que tocamos el fondo del cubo y nos preguntamos a dónde han ido a parar las palomitas.
Richard Coyle
Lo político es, subjetivamente, una fuente continua de aburrimiento y o de goce; es además y de hecho (es decir, a pesar de las arrogancias del sujeto político), un espacio obstinadamente polisémico, el sitio privilegiado de una interpretación perpetua (que si es lo bastante sistemática, no será nunca desmentida, hasta el infinito).
Roland Barthes