Los conservadores no son necesariamente estúpidos, pero casi todos los estúpidos son conservadores.
John Stuart Mill
Si hay cosas que pueden existir o no existir, es necesario que esté determinado un tiempo máximo para su existencia y su inexistencia; quiero decir un tiempo durante el cual es posible que la cosa exista con arreglo a cualquier forma de predicación, verbigracia: hombre, blanco, de tres codos u otra cualquiera de las cosas de este tipo.
Aristóteles
No estamos en este mundo para vivir nuestra vida, sino la de los otros. Las mayores alegrías, por otra parte, no son las que nosotros mismos gozamos, sino las que procuramos a los demás.
Barón Pierre de Coubertin
¡A veces! A veces, como un buque aprisionado a las amarras, que se arranca milagrosamente del ancla hacia la tempestad.
Borís Pasternak
En esta nueva era, lo que te hace libre es el conocimiento, no el trabajo.
Elfriede Jelinek
Creyendo lo peor, casi siempre se acierta.
Francisco de Quevedo
A veces es uno tan distinto de sí mismo como de los demás.
François de La Rochefoucauld
Donde se quiere a los libros también se quiere a los hombres.
Heinrich Heine
Tememos la vejez, aunque ignoramos si llegaremos a ella.
Jean de la Bruyere
No quiero pensar. No tengo que pensar que no quiero pensar. Porque es un pensamiento.
Jean-Paul Sartre
No voy a entrar en una cita a ciegas.
Jordana Brewster
Has visto muchas cosas y no temes la muerte, pero algunas veces la deseas, ¿no es cierto? Eso le pasa a los hombres que han visto lo que hemos visto. Como las flores, vamos muriendo, reconocer la vida de cada sorbo de aire, de cada taza de té, de cada muerte. Ese es el camino del guerrero.
Ken Watanabe
En general tendemos a adoptar actitudes pesimistas y de desaliento cuando el caminar se hace difícil. Es importante que seamos conscientes de que la actitud menos sencilla, aunque más inteligente, es justo la contraria.
Mario Alonso Puig
Entonces me quedé muy solo. Eso sucede siempre que uno ama sin reservas, como si fuera un jóven.
Pedro Juan Gutiérrez
Mientras ustedes no sean dueños de su alma, no lo serán de la mía.
Raymond Chandler
¡Ay Tales! no eres capaz de ver lo que pasa a tus pies y percibir el cielo al mismo tiempo.
Tales de Mileto