La pérdida de la riqueza es la pérdida de la tierra, como los sabios de todos los tiempos afirman; El hombre feliz va sin camisa.
John Heywood
Silencio es hablar calladamente con su propio dolor, y sujetarlo hasta que se convierta en vuelo, en plegaria o en canto.
Alberto Masferrer
Siempre sé una primera versión de ti.
Audrey Hepburn
Es una necedad arrancarse los cabellos en los momentos de aflicción, como si ésta pudiera ser aliviada por la calvicie.
Cicerón
La muerte es una quimera: porque mientras yo existo, no existe la muerte; y cuando existe la muerte, ya no existo yo.
Epicuro
¿Acaso la muerte hace que un hombre sea más sincero, o siquiera más listo? Seguro que los muertos son muy aburridos, siempre quejándose de tonterías... Que si el suelo está muy duro, que si me merecía una lápida más grande, que por qué ése tiene más gusanos que yo...
George R. R. Martin
Nada es sencillo, soy maestra de ballet y nada es sencillo.
Geraldine Chaplin
Disciplina, trabajo. El trabajo, la disciplina.
Gustav Mahler
La única igualdad en la tierra es la muerte.
James Bailey
Otra con ella montaraz zagala juntaba el cristal líquido al humano por el arcaduz bello de una mano que al uno menosprecia, al otro iguala.
Luis de Góngora
Aquel tipo tenía un tic, pero le faltaba un tac: por eso no era un reloj.
Ramón Gómez de la Serna
En realidad nunca dejamos de ser niños, niños monstruosos llenos de pupas y de varices y de tumores y de manchas en la piel, pero niños al fin y al cabo, es decir nunca dejamos de aferrarnos a la vida puesto que somos vida.
Roberto Bolaño
Los modelos se basan en la verdadera individualidad - las personas como Drew Barrymore, Ellen, Rihanna -. personas que realmente respeto. Pensé que sería genial ser parte de una familia que cree la individualidad es hermosa.
Taylor Swift
Una vez que tienes una buena excusa, abres la puerta a las malas excusas.
Terry Pratchett
El hombre es un animal evolucionado. El puede vestirse con la piel de otros animales.
Valeriu Butulescu
Las mujeres juegan con su belleza como los niños con un cuchillo, y se lastiman.
Victor Hugo