Señor, no te pido ver el horizonte lejano, un paso por dia es suficiente para mi.
John Henry Newman
Mis padres ciertamente no tenían nada que ver con el teatro. Yo soy una especie de accidente.
Alan Rickman
Soy un cantor de artes olvidadas que camina por el mundo para que nadie olvide lo que es inolvidable: la poesía y la música tradicional de Argentina.
Atahualpa Yupanqui
La soberanía no se discute, se defiende con las armas en la mano.
Augusto César Sandino
Todo socialista honesto debe desaprobar la aventura libia. Sólo significa derramamiento de sangre inútil y estúpido.
Benito Mussolini
El misticismo es tan sólo la más compleja forma de ser afeminado y decadente. El único lado útil de la inutilidad.
Fernando Pessoa
La convivencialidad es la libertad individual, realizada dentro del proceso de producción, en el seno de una sociedad equipada con herramientas eficaces.
Iván Illich
Un dibujo es un documento autobiográfico que da cuenta del descubrimiento de un suceso, ya sea visto, recordado o imaginado.
John Berger
Una de las mayores ironías de la naturaleza humana: cuanto más nos desorientan nuestras pasiones, más seguros estamos de ver las cosas con claridad.
John Verdon
Me quieren hacer daño pero cada día me hacen más feliz.
Juan Román Riquelme
En batallas del amor siempre les toca perder a los tímidos.
Molière
La vida es un tablero de ajedrez, donde el Hado nos mueve cual peones, dando mates con penas. En cuanto acaba el juego, nos saca del tablero Y nos arroja a todos al cajón de la Nada.
Omar Jayam
Es la realización de un sueño demencial, en el que uno manda, nadie piensa, todos caminan siempre en fila, todos obedecen hasta la muerte, todos dicen siempre sí.
Primo Levi
El hombre ama lo maravilloso, y ésta es la semilla de nuestra conciencia.
Ralph Waldo Emerson
Matar a un hombre no es ofenderlo. La muerte la lleva todo el mundo en la sangre desde que nace. Lo único que hacemos es adelantarle la fecha a nuestro enemigo para impedir que él haga lo mismo con uno.
Ramón J. Sender
En Río de Janeiro tienen muchos reyes, pero Dios, sólo uno.
Romário