Yo no digo que todos los hombres sean iguales en su habilidad, carácter o motivaciones, pero sí afirmo que debieran ser iguales en su oportunidad para desarrollar el propio carácter, su motivación y sus habilidades.
John F. Kennedy
Os invito a pedir a Dios que os ayude a descubrir vuestra vocación en la sociedad y en la Iglesia y a perseverar en ella con alegría y fidelidad. Vale la pena acoger en nuestro interior la llamada de Cristo y seguir con valentía y generosidad el camino que él nos proponga.
Benedicto XVI
Nadie ignora que todas las cosas humanas, como los Silenos de Alcibiades, tienen dos caras, totalmente diferentes.
Erasmo de Róterdam
En el mundo hay cosas que es mejor no saber.
Haruki Murakami
Una serpiente es más humana que un fascista o un racista; un tigre es más humano que un fascista o un racista.
Hugo Chávez
Así reinas, divino ser del universo, sobre aquellos que te amaron ciegamente a través de las apariencias.
Juan Gil-Albert
El optimismo es una fuente de riqueza.
Manuel Vicent
El hombre llega como un novicio a cada edad de su vida.
Nicolas Chamfort
¡A los príncipes se debe advertir, cuando acaso se equivocan, lo que es muy cierto que saber quisieran!
Nicolás Fernández de Moratín
El estado del matrimonio, con los afectos que le son propios o sin ellos, es la más exacta imagen del cielo y del infierno que somos capaces de formarnos en esta vida.
Richard Steele
Nuestra civilización vive según el principio de los sofistas atenienses denunciados por Platón, a saber: tener los deseos más violentos posibles y encontrar el medio de satisfacerlos.
Roger Garaudy
Es una necedad y una vergüenza responder antes de escuchar.
Salomón
Pero, hombre, si no estoy ciego, tengo vista normal y hábitos normales.
Salvador Allende
Mientras el ser humano se sienta atraído exclusivamente por cosas tan efímeras como la belleza, el mundo estará lleno de insatisfechos.
Santiago Alonso
Los ángeles necesitan un cuerpo supuesto, no por ellos mismos sino por beneficio de nosotros.
Tomás de Aquino
Yo nací sin profesionalismo: no me acerqué a la radio ni a la televisión. Siempre tomé la música como un profundo amor. De chico nunca se me ocurrió pensar que iba a cobrar por esto. Pero cuando la cosa es en grande, con traslados, grabaciones y cantidad de músicos, aparece la necesidad de ser remunerado.
Tomás Lipán