La mujer que yo quiero no necesita bañarse cada noche en agua bendita.
Joan Manuel Serrat
La vejez tiene bastantes torpezas propias; no le añadamos la vergüenzas del vicio.
Catón
Tu historia y mi honor desnudaos en la feria, bailaron su danza de horror, sin compasión...
Enrique Santos Discépolo
¿de qué me serviría cagarme en la mesa de mi antiguo jefe, limpiarme con sus papeles y luego partirle la cara, si después nadie se entera?
Fernando Trujillo Sanz
Hijo de un siglo más bien escéptico que incrédulo, flotando entre dos tipos de educación contrarias, aquélla de la Revolución, que negaba todo, y aquélla de reacción social, que pretende restaurar el conjunto de las creencias cristianas. ¿Me vería yo conducido a creer todo, como nuestros padres los filósofos lo habían hecho sin protestar?
Gérard de Nerval
Cuando mi amigo está infeliz, voy a su encuentro; cuando está feliz, espero que me encuentre.
Henri-Frédéric Amiel
Le quedaban por conocer muchas noches en las que sucumbiría a mujeres que su avidez y el alcohol le harían juzgar deseables, para llevarse las manos a la cabeza al descubrir que se había metido en la cama con descomedidas parientes de Oliver Hardy o con casquivanas émulas de Bela Lugosi.
Javier Marías
La muerte de cualquier hombre me disminuye, porque yo formo parte de la humanidad; por tanto nunca mandes a nadie a preguntar por quién doblan las campanas: doblan por ti.
John Donne
Amar es esencialmente entregarse a los demás.
Juan Pablo II
El entrenador lo que tiene que hacer es lograr que el futbolista juegue de manera proporcionada a las virtudes que posee. El que lo logra es un buen entrenador, y el que no lo logra, está fracasando. Entonces la cuestión no es de estilo, ni de organización, ni de preparación física, lo importante es que los jugadores estén cerca de su máximo potencial durante un período alargado.
Marcelo Bielsa
Conocer bien las cosas es liberarse de ellas.
Marguerite Yourcenar
La vida dicta a los hombres sus leyes, que no están escritas en parte alguna.
Mijaíl Shólojov
Cuanto más amamos a alguien menos conviene halagarle.
Molière
Es evidente que el común entusiasmo por la igualdad es, en un sentido fundamental, anti humano. Tiende a reprimir el florecimiento de la personalidad individual, de la diversidad y de la civilización misma. Es la búsqueda de la uniformidad de los salvajes.
Murray Rothbard
El honor no es más que una palabra que sirve para que los caballeros juren por ella.
Samuel Butler
No hace buenas obras el que contra su voluntad es útil.
Séneca