El alma humana era un bosque profundo y oscuro en el que uno toma todas las decisiones solo.
Jo Nesbø
Como tengo el corazón sin los cuidados de amar, tiene el alma más lugar de cumplir su obligación.
Agustín Moreto
Sólo le pertenezco a alguien: a mí mismo.
David Carradine
Es entre los cansados de demoras y enredos, entre los decididos a actuar aquí y ahora que brillará, radiante, el sol de nuestros sueños siempre que nuestra voluntad se funda en una sola.
Émile Armand
Lo que en las circunstancias graves más suele faltar a los hombres no es ni el talento ni el sentido común, sino el carácter y la voluntad; más daño suele venir de la debilidad y de la nimia desconfianza de sí mismo, que de la arrogancia y de la impetuosidad desenfrenada.
Filippo Pananti
Comprenda que algunos de sus enemigos se encuentran entre sus mejores amigos.
Jean Cocteau
Pero el socialismo marxista ha de permanecer siempre como un portento para los historiadores de la opinión: como una doctrina tan ilógica y tan torpe puede haber ejercido, de modo tan poderoso una influencia sobre la mentes de los hombres y, a traves de ellas, sobre los acontecimientos de la historia.
John Maynard Keynes
Hay una clase de autómatas que ofrecen el mayor interés: los que imitan, no los gestos, sino las acciones del hombre.
Leonardo Torres Quevedo
Tú justificas mi existencia: si no te conozco, no he vivido; si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido.
Luis Cernuda
La santificación se forja, cuando Dios va quitando al alma todo y la deja como en un inmenso desierto.
Maravillas de Jesús
Burro es burro aunque le afeiten las orejas.
Marcelo Rodríguez
El mundo no es un lugar bueno ni bien organizado.
Michel Houellebecq
Traten de dejar el mundo en mejores condiciones que las que tenia cuando entraron en el.
Robert Baden-Powell
La lealtad constituye el más sagrado bien del corazón humano.
Séneca
Sé rápido como el trueno que retumba antes de que hayas podido taparte los oídos, veloz como el relámpago que relumbra antes de haber podido pestañear.
Sun Tzu
En la última década se ha desarrollado una ideología nueva que rompe con eso. Pretendemos que el único rol del Estado es desmantelar todas las legislaciones que protegen a los trabajadores para darles lo que se les antoja a los reyes de la economía. El poder no tiene límite. Sin embargo, una de las fórmulas de la democracia la dio Montesquieu: ningún poder ilimitado puede ser legítimo.
Tzvetan Todorov