A veces, debemos superar nuestros miedos para ver la belleza que se esconde en el otro lado.
Jeffrey Wright
No se necesitan nueve meses, se necesitan cincuenta años para hacer un hombre, cincuenta años de sacrificio, de voluntad, de... ¡tantas cosas! Y cuando ese hombre está hecho, cuando ya no queda en él nada de la infancia ni de la adolescencia, cuando verdaderamente es un hombre, no sirve nada más que para morir.
André Malraux
La humildad es más fácil al que ha llevado a cabo alguna cosa, que al que nunca ha hecho nada.
Arturo Graf
Escribo novelas para recrear la vida a mi manera.
Arturo Pérez-Reverte
La amistad no se cuenta aunque muchos la venden, ya que los amigos comprados o no lo son o valen poco.
Baltasar Gracián
Concebir un pensamiento, un solo y único pensamiento, pero que hiciese pedazos el universo.
Emil Cioran
Sobre todo sé bueno: la bondad, más que ninguna otra cosa, es lo que mejor desarma a los hombres.
Enrique Lacordaire
El mundo nada puede contra un hombre que canta en la miseria.
Ernesto Sabato
Dejar pasar los días y las semanas, devanando un presente sin futuro, era lo instintivo, lo mismo que nuestros pulmones ejecutan el movimiento respiratorio siguiente mientras tienen aire disponible.
George Orwell
Los hombres no son sino niños en más grande escala.
John Dryden
A veces el mal está en los ojos del que mira y no en lo que ve.
Julia Navarro
Incontables las lunas que brillaban sobre sus azoteas, o los mil soles espléndidos que se ocultaban tras sus muros.
Khaled Hosseini
Me siento feliz de no ser hombre y verme en el caso de tener que casarme con una mujer.
Madame de Staël
Entre tantas constituciones como la filosofía propone y la historia presenta ensayadas, no hay sino una que reúna las condiciones de justicia, orden, libertad y duración, sin las que no pueden subsistir ni la sociedad ni el individuo.
Pierre Joseph Proudhon
El orgullo solo produce dolor. Nunca ayuda. Hace que cada parte de tu cuerpo sea como la punta de tu pene.
Ving Rhames
La cultura consumista insiste en que jurar lealtad eterna a nada y nadie es imprudente, ya que en este mundo de nuevas oportunidades relucientes surgen todos los días.
Zygmunt Bauman