Los hombres sólo aceptan el cambio resignados por la necesidad y sólo ven la necesidad durante las crisis.
Jean Monnet
¡Como ríe la vida si tus ojos negros me quieren mirar!
Alfredo Le Pera
Éxito es ir de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo.
Bernardo Stamateas
En la esencia misma de la poesía hay algo indecente: expresamos cosas que ignorábamos tener en nosotros.
Czeslaw Milosz
Un regalo de Reyes suele suponer, más que el capricho del niño, el fantasma de un anhelo o desconsuelo de los padres.
Francisco Umbral
El placer de criticar nos priva del de emocionarnos ante un hermoso espectáculo.
Jean de la Bruyere
El hombre todo lo perfecciona en torno suyo; lo que no acierta es a perfeccionarse a sí mismo.
Jean-Baptiste Alphonse Karr
Una parte esencial para conseguir tener éxito es tener creencias que le permitan alcanzarlo. Creencias poderosas no le garantizarán tener éxito siempre, pero le mantendrán lleno de recursos y le harán capaz de obtener el éxito al final.
John Grinder
Yo no soy pesimista. Es el mundo el que es pésimo.
José Saramago
Los gorriones me han causado muchos dolores de cabeza. La siembra directa no puede triunfar si no hay un método eficaz de mantener a raya los pájaros y hay muchos lugares en los cuales la siembra directa ha progresado lentamente por esta única razón.
Masanobu Fukuoka
No diga que quiere bien quien libre, alegre y contento, piensa o habla en otra cosa; que amor es del almadueño.
Pedro Calderón de la Barca
El emprendedor siempre busca el cambio, le responde y lo explota como una oportunidad.
Peter F. Drucker
El que persigue un sistema le tiene horror a la verdad.
Ralph Waldo Emerson
El aseo del vizcaíno es proverbial; el español apenas se lava una vez en su vida y se muda una vez al año. Oíd hablar a un vizcaíno, y escucharéis la más eufórica, moral y culta de las lenguas; oídle a un español, y si sólo le oís rebuznar, podéis estar satisfechos, pues el asno no profiere voces indecentes ni blasfemias.
Sabino Arana
Una mujer que se mira al espejo y se arregla no siente vergüenza de reducirse a sí misma, a ese ser infinito que mira todas las cosas, a un pequeño espacio.
Simone Weil
Tuve la suerte de tener algunos profesores buenos en mi juventud, hombres y mujeres que se introdujeron en mi pequeña cabeza y encendieron una cerilla.
Yann Martel