No se puede engañar al lector, y esa es la primera regla para dedicarse a escribir novelas.
Jean Larser
Apartad a las prostitutas de la vida humana y llenaréis el mundo de lujuria.
Agustín de Hipona
Seamos esclavos de las leyes para poder vivir en libertad.
Cicerón
Yo sé que te aliviará, la pena.
Fito Páez
Ordinariamente, aquéllos que educan a los niños y no les perdonan nada se perdonan todo a sí mismos.
François Fénelon
¿No tendría que ser yo un barril de memoria si pretendiese llevar conmigo hasta mis razones?
Friedrich Nietzsche
No es que atardezca es que la lluvia es noche: otoño en la ventana.
Io Sogi
Sentía que Watchtower era algo que yo mismo había escrito pero a lo que nunca pude dar forma. Siempre me sentí de esa manera con Dylan. No podría escribir las palabras que él escribe, pero me ha ayudado a escribir, porque tengo mil canciones que nunca serán terminadas. Me siento un rato y escribo dos o tres palabras. Ahora tengo más confianza en mi mismo como para poder terminar una.
Jimi Hendrix
Yo mandaba más que el gobierno en ese momento, porque yo mandaba sobre el corazón de muchos miles de hombres. Esa es, quizá, la primera condición para conducir. Es decir, actuar sobre el corazón de los hombres, no sólo sobré su voluntad, para que lo acompañen a uno conscientemente y de corazón.
Juan Domingo Perón
Que la eternidad fluya por mis manos y en los labios el alboroto colosal del cosmos.
Luis Alberto Costales
¿Qué es la verdad? Pregunta difícil, pero la he resuelto en lo que a mi concierne diciendo que es lo que te dice tu voz interior.
Mahatma Gandhi
Si algún escritor intentara demostrar que la libertad no le es necesaria, se asemejaría a un pez que asegurara públicamente que el agua no le es imprescindible.
Mijaíl Bulgákov
No sólo estamos en el universo, el universo está en nosotros.
Neil DeGrasse Tyson
Elegimos amar, pero no podemos elegir dejar de amar.
Publilio Siro
Cristo no ha dejado a sus ministros de este mundo, a menos que estén también dotados de autoridad civil, ninguna autoridad para mandar a otros hombres.
Thomas Hobbes
En nuestro arte, cada palabra que pronunciamos, cada acto que ejecutamos es para bien o para mal. ¡Antes de obrar o hablar hay que conocer el precio!
Ursula K. Le Guin
