Yo detesto los libros, pues sólo enseñan a la gente a hablar de lo que no entienden.
Jean-Jacques Rousseau
Te voy a escribir la canción más bonita del mundo, voy a capturar nuestra historia tan sólo un segundo.
Amaia Montero
Lo que hacemos es innovar y no mirar los resultados.
Amancio Ortega
De la mujer es la casa, donde el hombre es un huésped.
Antonio Gala
La resignación, renunciando a toda esperanza, es un consuelo parecido a la muerte, y por eso es un gran consuelo.
Benito Pérez Galdós
Sigue en pie aquello de Hitchcock de que la duración ideal de una película era el aguante de la vejiga humana.
David Trueba
Cuando miro a la gente me miran y sonríen, es entonces cuando sé que soy amada. Ese es el momento en el que no me preocupa nada, no hay problemas.
Etta James
Los dos soportes de la dirección espiritual son la libertad y la responsabilidad del que busca esa ayuda.
Francisco Fernández-Carvajal
No es necesario, como se cree generalmente, renunciar a los placeres naturales antes de poder conquistar los espirituales. Por el contrario, lo disfrutamos con más exquisita fruición a medida que crecemos interiormente.
Helen Keller
Hay sentimientos a los que no se puede dar cuerpo verbal, mas que es posible seguir perfectamente con los ojos cerrados.
Horacio Quiroga
La edad, por sí sola, no hace a nadie mejor ni más sabio, sólo acentúa lo que cada uno ha sido siempre.
Isabel Allende
Y los amantes saben, que sin querer siquiera hay un amor que crece como una enredadera.
José Ángel Buesa
Y sepan que ningún vicio acaba donde comienza.
José Hernández
He fumado unos cincuenta ciogarrillos por día durante cincuenta años, hacen un total de un millón de cigarrillos. Una cantidad de humo como para oscurecer el cielo de Roma. Aun a sabiendas que es perjudicial, no paras. ¿Servirá para llenar vacíos?. Que cada uno viva y muera como le plazca. Sí, es perjudicial, ¿y qué?
Marcello Mastroianni
Es posible que no seamos capaces de amar precisamente porque deseamos ser amados, porque queremos que el otro nos dé algo (amor), en lugar de aproximarnos a él sin exigencias y querer sólo su mera presencia.
Milan Kundera
Las leyes yacen vencidas bajo la espada guerrera.
Ovidio