Debido a que prestamos demasiada atención a los defectos de los demás, morimos sin haber tenido tiempo de conocer los nuestros.
Jean de la Bruyere
Como poeta, me interesa descubrir la textura de mi conciencia, mostrar lo que pasa por mi mente, tanto si se trata de asuntos sexuales como políticos o familiares.
Allen Ginsberg
Escribo con palabras claras para llegar al público.
Ernesto Cardenal
No debemos confiarnos en aquellos que presumen de generosos con el bien ajeno.
Esopo
Sólo disponéis de un día para vivir en la Tierra. Haced todo lo posible para pasarlo en paz.
Félicité Robert de Lamennais
Cuando entré en tu casa me pareció volver de nuevo al pasado, a uno de esos hermosos crepúsculos tristes del año 1843, cuando aspiraba el aire desde mi ventana, lleno de tedio y con la muerte en el alma.
Gustave Flaubert
Si no las abordamos adecuadamente, aun las más placenteras experiencias contienen en su interior la semilla de la insatisfacción.
Jon Kabat-Zinn
Se sale de la tierra tan contento cuando se ha hecho una obra grande.
José Martí
Dios existe; pero no tiene ninguna prisa en hacerlo saber.
León Tolstói
Cierta aristocracia, educada desde la infancia para considerar su nombre como una ventaja interior que nada puede quitarle, sabe que puede evitarse -pues nada le añadirían- los esfuerzos que sin resultado posterior apreciable hacen tantos burgueses por profesar sólo opiniones bien consideradas y frecuentar sólo a personas bienpensantes.
Marcel Proust
Pero qué extraño es el mundo: alguien que te cae muy mal te trata con amabilidad, mientras que uno que parece ser tu amigo acaba jugándotela.
Natsume Sōseki
La pasión es una obsesión positiva. La obsesión es una pasión negativa.
Paul Carvel
Los ejemplos tienen más fuerza que los preceptos.
Samuel Johnson
Lo enormemente doloroso del trabajo manual es que se está obligado a esforzarse durante largas horas simplemente para existir. El esclavo es aquél al que no se le propone bien alguno cómo objeto de sus fatigas, sino la mera existencia.
Simone Weil
Lo primero que debe hacerse es llevar a una muchacha al punto en que sólo conozca un deber: el de abandonarse plenamente a su amado, tanto como si, llena de exaltada beatitud, mendigase ese favor. Sólo entonces es cuando se pueden obtener de ella los verdaderos y grandes placeres. Y a esto sólo se llega por medio de una elaboración espiritual.
Søren Kierkegaard
Mientras quemaban a un fanático que decía que era el Espíritu Santo, comentó el caballero de La Ferté: ¡Qué mala suerte tienen en esa familia!.
Voltaire