Frecuentemente la verdad suele ser lo contrario de los rumores que circulan acerca de los sucesos y de las personas.
Jean de la Bruyere
Desprecia al hombre orgulloso que se avergüence de verter lágrimas.
Alfred de Musset
El principal error de la filosofía es la exageración.
Alfred North Whitehead
Promete que serás feliz, te ponías tan guapa al reí. Y así, sólo así, quiero recordarte. Así, como antes; así, adelante; así, vida mía, mejor será así
Amaia Montero
La educación actual hace a los hombres inútiles.
Cristina Almeida
Cuando era joven me dijeron Ya lo verá usted cuando tenga cincuenta años. Ahora tengo cincuenta y aún no he visto nada.
Erik Satie
La felicidad es la única sanción de la vida; donde no hay felicidad, la vida es un experimento loco y lamentable.
George Santayana
Podrás perder mil batallas pero solamente al perder la risa habrás conocido la auténtica derrota.
Ho Chi Minh
¡Miren! Los estoy enviando como ovejas en medio de lobos; por lo tanto, demuestren ser cautelosos como serpientes, y, sin embargo, inocentes como palomas. (Mateo 10:16)
Jesús de Nazaret
Vivir es descubrir por uno mismo aquello que es verdadero, y uno puede hacer eso únicamente cuando hay libertad, cuando existe una constante revolución interna.
Jiddu Krishnamurti
El matrimonio es una de las formas de odiarse unos a otros en las personas de todas las clases sociales.
Lord Byron
La borró de la fotografía de su vida no porque no la hubiese amado, sino, precisamente, porque la quiso. La borró junto con el amor que sintió por ella.
Milan Kundera
La contemplación a menudo hace la vida miserable. Debemos actuar más, pensar menos, y parar de mirando a nosotros mismos.
Nicolas Chamfort
Un hombre libre otro hombre libre y es el mismo animales exaltados ante el miedo con máscara de barro muertos prisioneros locos todos los ausentes. Pero tú por qué no estás aquí tú para despertarme.
Paul Eluard
Siendo la vida como es, uno sueña con vengarse.
Paul Gauguin
El hombre, cuanto más asciende de la escala de la felicidad tanto más sube en la escala de las exigencias.
Severo Catalina