El hombre que se lamenta de la infelicidad podría, cuando menos, participar de la dicha de sus amigos y allegados; la envidia le priva de esta oportunidad.
Jean de la Bruyere
Dos amores han fundado dos ciudades: al amor a uno mismo, la terrenal; y el amor a Dios, la celestial.
Agustín de Hipona
Un recuerdo es valioso solo para la persona que lo conserva.
Blanca Miosi
El honor para los italianos no es cualquier cosa, es tan importante como los funerales.
Cuando aspiras a alcanzar el puesto más alto, recuerda que es honorable la segunda, o tercera posición.
Cicerón
Si no puedes ser poeta, sé el poema.
David Carradine
Cuando mente, cuerpo y espíritu están en armonía, la consecuencia natural es la felicidad.
Deepak Chopra
No metan una canica en la oreja de un caballo, sino un ruiseñor, el ruiseñor ganará la carrera y el caballo cobrará la apuesta que hizo por ustedes.
Francis Picabia
Nosotros, por nuestra carne, nuestra sangre y nuestro cerebro, pertenecemos a la naturaleza, nos encontramos en su seno, y todo nuestro dominio sobre ella consiste en que, a diferencia de los demás seres, somos capaces de conocer sus leyes y de aplicarlas adecuadamente.
Friedrich Engels
Los alemanes, y no sólo ellos, poseen el don de hacer inaccesibles las ciencias. Nada alegraba tanto a los alemanes de los viejos tiempos como el hecho de que nadie tuviera que obedecer a nadie.
Goethe
Por sobre todas las cosas, detesto perder.
Jackie Robinson
La vida de un lisiado consiste en ver hacer a los demás lo que él no puede hacer, lo cual no era la peor opción para un futuro novelista.
John Irving
... ¿cómo podemos pensar en la extravagancia de que una criatura femenina pueda tener mayor valor por tener una parte de su cuerpo poco más o poco menos abierta?
Marqués de Sade
Lo mejor de la vida es el pasado, el presente y el futuro.
Pier Paolo Pasolini
Quisiera tener un rizo de tu oscura cabellera, para gastarme los ojos en sólo mirar sus hebras.
Salvador Rueda
Estar de acuerdo con un hombre inteligente restaura la normalidad.
Saul Steinberg