La modestia es al mérito lo que en un cuadro son las sombras respecto a las figuras: le da fuerza y relieve.
Jean de la Bruyere
América, ¿Cuándo pondremos fin a la guerra entre seres humanos? Que te jodan a ti y a tu bomba atómica.
Allen Ginsberg
Me abrazarÃa al diablo sin dudar, por ver tu cara al escucharme hablar.
Amaia Montero
Si el ser humano estuviera destinado a pensar, no tendrÃa oÃdos.
Arthur Schopenhauer
Cuando un amante trata de crueldad la esquivez de su amada o el gusto de ella en hacerle sufrir, esto no es verdaderamente una hipérbole.
Deseo ser mi propio apoyo, o en todo caso, serlo para mis canciones. Quiero ser el vehÃculo para mis canciones. Quisiera colorear el material de la mayor cantidad de expresión visual que sea necesario para esa canción.
David Bowie
Tengamos en cuenta que la virtud, el saber, el amor a la libertad son las cualidades que desencadenan la fatal venganza de los inquisidores y que, cuando las mismas son destruidas, dejan a la sociedad en la más vergonzosa ignorancia, corrupción, y sometimiento.
David Hume
Cada acción genera una fuerza de energÃa que regresa a nosotros de la misma manera lo que sembramos es lo que cosechamos.
Deepak Chopra
Mi arte da sentido a mi vida.
Edvard Munch
El hombre que no tiene nada que perder es peligroso.
Goethe
Es muy fácil perdonar a nuestros enemigos cuando no tenemos los medios de aniquilarlos.
Heinrich Heine
Autoriza a mis ansiosas manos, y déjalas moverse delante, detrás, en medio, arriba, abajo.
John Donne
El médico que a la vez no es un filósofo no es ni siquiera médico.
José de Letamendi
Voy a superar esto. Me voy a enfrentar con esto ahora mismo. Es sólo una sombra en mi mente y, por supuesto, no estoy dispuesto a darle poder a una sombra.
Joseph Murphy
La filosofÃa y la ciencia constituÃan antaño una sola ocupación.
Lou Marinoff
Siempre fui enemigo de los grupos y las filas de gente. Me aferro a mi calidad humana, a mi propia personalidad, individual y definitiva. No es que sea antisocial. Nada de eso, lo repito. Pero el hombre adocenado, el hombre masa, me asquea.
René Rebetez