No se puede ser indiferente ante la contaminación interior del hombre.
Jean Cocteau
Hay aquí dos hechos importantes: primero, que el ser humano nunca está satisfecho, excepto de una forma relativa o como si fuese sólo el peldaño de una escalera, y segundo, esas necesidades parecen ordenarse en una especia de jerarquía de predominio.
Abraham Maslow
No quiero ir nada más que hasta el fondo.
Alejandra Pizarnik
Solo soy una más de todas las chicas que besas.
Amy Winehouse
No se puede olvidar el tiempo más que sirviéndose de él.
Charles Baudelaire
Que la división del trabajo sea llevada al grado supremo, a fin de aficionar cada sexo y cada edad a las funciones más adecuadas.
Charles Fourier
Nunca se queda nada en suspenso, nunca nada se queda inmóvil.
Fred Vargas
El que aspira a algo grande, ha de saber limitar sus deseos; quien, al contrario, todo lo quiere, no ambiciona, en realidad, nada y nada consigue.
Georg Wilhelm Friedrich Hegel
Algunos pensamos que lo que nos hace más fuertes es aguantar, pero otras veces es dejarlo estar.
Hermann Hesse
Y la vida siguió, como siguen las cosas que no tienen mucho sentido.
Joaquín Sabina
Nunca estés sin una mujer, porque estar sin mujeres, es como estar en prisión, por eso alguien inventó a las prostitutas, para que aquel que no pueda mantener una, al menos pueda alquilarla para tener agradable compañía, así que ya sabes hermano, nunca estés sin mujeres, que eso no es saludable en la vida de un hombre.
John Dillinger
Los periodistas me queréis clavar un pino en la tripa.
Juan Carlos de Borbón
Pues para organizar la gran producción sin patronos es preciso en primer lugar, destruir la organización mercantil de la economía social y sustituirla por la organización comunal,...
Lenin
No hay cosa que nos engañe más que nuestro juicio.
Leonardo da Vinci
Evita la conversación de aquellas personas cuya palabra, en vez de ser trabajo, es placer. Los grandes parlanchines suelen ser espíritus refinadamente egoístas, que buscan nuestro trato, no para estrechar lazos sentimentales, sino para hacerse admirar y aplaudir.
Santiago Ramón y Cajal
Y eso era el amor: un respeto sin motivo concreto.
Toni Morrison
