Con un poco de imaginación puedes vivir fácilmente toda tu vida en una tarde.
Jean Anouilh
La gente siempre decía que el pueblo estaba muerto, pero en realidad cuando había un funeral era cuando más se animaba.
Alice Munro
Nacemos con las manos cerradas, porque no traemos nada y, cuando nos morimos, lo hacemos con las manos abiertas, porque no nos llevamos nada.
Bernardo Stamateas
Creo que se puede hacer a través de la risa una reflexión profunda. Es el poder de síntesis que a mí me apasiona del humor gráfico, el poder de resolución que tiene, de plantear una solución, y además que sea simpática.
Caloi
El pasado fue, en su momento, presente, y éste es a su vez futuro de aquél.
Carlos Mijares Bracho
Un miedo vigilante y previsor es madre, de la seguridad.
Edmund Burke
¡Oh, cuán perdido está para la virtud, para el pensamiento viril, para los nobles impulsos del alma, aquel que se cree que soledad es estar solo!
Edward Young
No basta con hablar de paz. Uno debe creer en ella. Y no es suficiente con creer. Hay que trabajar para conseguirla.
Eleanor Roosevelt
Abro un viejo libro y leo en él que la mujer ama todavía aquel a quien engaña.
George Meredith
Queremos menos palabrería liberal y más respeto a la libertad profunda del hombre.
José Antonio Primo de Rivera
¿Qué quejas?. No son quejas, son verdades. ¿Eres hipócrita?.
José Mourinho
Lo que hace que no tengamos poetas actualmente, es el hecho de que podemos pasarnos sin ellos. No son necesarios a nuestros gustos, porque no lo son ni a nuestras leyes, ni a nuestras fiestas políticas, ni a nuestros placeres domésticos.
Joseph Joubert
Es más provechoso en este mundo recibir favores que hacerlos. Tomad, como ejemplo, un brote que se está marchitando, plantadlo en la tierra, y enseguida tendréis que regarlo, pues lo habéis plantado.
Laurence Sterne
Sea como fuese. Volver atrás es imposible. Mi reloj va siempre hacia adelante. La historia también.
Oswald de Andrade
Nuestra admiración por el arte antiguo no es admiración por lo viejo, sino por lo natural.
Ralph Waldo Emerson
La adversidad no puede con el hombre valiente.
Séneca